Era tarde, verano… calor. Entrar al shopping fue una felicidad enorme, jamás agradecí tanto que existiera el aire acondicionado. No sabíamos qué comer. No teníamos mucha hambre, y no daba almorzar un yogurth en La Yogurtería. Gatsby tenía un estilo bastante copado. Tenía una onda americana pero con comida internacional. Entramos. No era fan de las ensaladas, hasta que el calor y el poco hambre hizo pedirme una caesar. Todos pedimos ensaladas, y otro un sándwich. Todo estuvo riquísimo. Comimos en la terraza, todo bárbaro. La atención fue buena, y hasta se tomaron la molestia de recomendarnos postre. Pequeño detalle. Quizá comer con la vista al cementerio no sea la mejor imagen del mundo… pero es lo que hay. Los precios son elevados, pero es una buena opción dentro de la zona. Adentro tiene un lindo espacio también. Me gustaría volver para tomar un café con torta un domingo a la tarde.