Süss Cupcake Café

Muy lindo lugar y ambiente! Merienda o desayuno clásico (café con leche y 2 croissant $ 72). Tiene opciones dulces y saladas y tortas ricas. Tiene también lugar para estar afuera. Lo recomiendo!

gran lugar, muy girly, lleno de detalles y cosas ricas. tiene afuera, salón y patio, ofrecen manta si tenés frío, cadena si vas en bici y te la olvidaste, papel y lápices para que los chicos dibujen y mesas para grupos.
la atención es muy buena y las cosas son ricas, una bomba mejor dicho.
entonces por qué 4 y no 5 estrellas? porque pedimos un capuccino XL que tenía el tamaño de un capuccino normal (y estaba un poco frío), porque estaban ofreciendo cosas para degustar y nos dijeron «a uds no porque todavía no les llegó el pedido» WHAT? qué tiene que ver, con más razón!
pero sinceramente sacando esos detalles es recomendable, las porciones de torta son para compartir y no las terminás!

Buscaba un lugar para ir a tomar el té por la zona, ya que es punto medio entre la casa de una amiga y la mía. No tenía idea de dónde ir, y obviamente usé Unilocal para proponer el lugar de encuentro. Mi amiga me confirmó que ya había ido y había cosas ricas, así que fuimos. Domingo, 17hs, explotaba de gente, pero de tanto en tanto una mesa se vaciaba y conseguimos lugar sin esperar. Pero mamita, qué bochinche había! Claro, muchas mujeres, muchas charlas, risas, etc, da como resultado un nivel de ruido importante, al cual tenés que sumarte obligadamente para poder conversar.
El lugar es muy bonito, muy blanco y rosa, tan decorado como la casa de Barbie… Tan femenino! Tiene mesitas en la calle, adentro y en un patio en en fondo. Nos quedamos adentro, por el aire acondicionado ;)
Para merendar tienen varias opciones, de todos los precios, y nos pareció razonable pedir el «Tea for two”($ 260), que trae una tetera grande (té en hebras a elección de unos 10 tés), dos scons con mermelada casera y queso untable, dos scons con hierbas, rellenos con queso y jamón crudo, y dos porciones de torta a elección. Pedimos cheescake con oreo (delicia!) y cheescake de maracuyá. Son enormes, tuve que pedir que me las dieran para llevar a casa porque era una pena dejarlas… Comen 3 tranquilamente.
La atención fue muy cordial, tuvimos una pequeña barrera idiomática con nuestra moza, que hablaba portuñol, y había malinterpretado el pedido, pero pudimos corregirlo sin mayores problemas.
Todo muy rico y buenos precios, le bajé estrellita por el tema del ruido.

Vine a merendar. El lugar estaba lleno, pero no dudaron en sacar el cartel de «reservado» de la mesa más grande del fondo para que pudiéramos sentarnos (parece que solamente lo ponen para evitar que pocas personas ocupen el potencial lugar para un grupo más o menos numeroso). Como no sé cuándo voy a volver por estos lares, decidí pedir el «Tea for two», y probar de todo un poco. Por $ 260 me trajeron dos porciones de torta (en esta ocasión un cheesecake de frutos rojos y una Havannet –ups, muy poco gourmet-​), dos scons con queso crema y mermelada de frutos rojos (hecha por ellos mismos) y dos scons de hierbas rellenos con un dip de ciboulette y jamón crudo. De tomar, obvio, té (Earl Grey, hay más opciones).
Tardaron muy poco en traernos las cosas, pero es de esperar porque ya tenían las cosas casi hechas. Las tortas estaban ricas, no fueron las mejores que comí en mi vida pero no decepcionaban. Los scons ya son un tema aparte. Los que estaban rellenos eran increíbles, te dejaban muy altas las expectativas como para comer los otros normales y encima ponerte a untarles mermelada o queso (además, convengamos que para cuando me puse a probarlos ya estaba llena). En mi mesa pidieron una torta de manzana, y llegó recién salida del horno (hermoso).
Ahora a los detalles:
–La taza que me trajeron no estaba en condiciones óptimas, tenía un par de manchitas (¿de chocolate?) en su exterior.
–Si bien a simple vista está súper bien decorado, algunos adornos de la pared se habían caído al piso.
–La música estaba buena, era tranquila, pero resultaba muy difícil escucharla porque el local es extremadamente ruidoso.
–Las mesas están muy juntas, probablemente contribuyendo al problema mencionado arriba.
–La atención no es la mejor. Nos vinieron a preguntar «cómo estaba todo» varias veces, pero llegó un punto en el que resultó obvio que querían que nos fuéramos.
–El café es Nespresso.
Resumiendo, es un lugar lindo (hasta tienen un patio con algo de vegetación y fuente, con más mesas) y la comida es rica (seguramente por esto es visitado por personas de literalmente todas las edades). Los precios no son tan elevados. Le suma puntos que hay un pianista en vivo un par de días a la semana.

Ideal para ir a tomar el té. Tanto los cafés como los tés son muy ricos, que de estos últimos tienen gran variedad. Recomiendo los scons de arándanos, los scons salados (que vienen con dip de ciboulette y jamón crudo) y las tortas. Todo es delicioso y se nota que es casero.
Siempre nos atendieron muy bien.

La comida espectacular. Lastima que pedimos agua, limonada y ensalada caesar y no tenian ni agua, ni limonada, ni pollo… El servicio tardo muchisimo. Van 4 estrellas porque se disculparon y nos regalaron un postre a todos por las inconveniencias

Me encanta este lugar, hoy por primera vez fui a desayunar y me quede a almorzar, de desayuno pedi una ensala de fruta y un te. riquisimo, y para almorzar me pedí una ensalada con salmón y queso brie super abundante y rica. Si bien la carta para comidas no es abultada, lo que hay es rico y de calidad. Los dulces son muy ricos, y los precios acordes, recomiendo el cheese cake de oreo, el común, y los scons con queso crema jamon crudo y ciboulette. Se llena bastante los fin de semanas, y feriados, el ambiente a veces se torna bullicioso, ir con tiempo!

Es un muy limdo lugar. La atención mejoró muchisimo. El cheesecake de maracuya es excelente. Tienen un brunch muy bueno. Ademas tienen desayunos y meriendas armados para todos los gustos

Pasé por esta cafetería tras recomendación de una amiga. Con tiempo libre y sola por la zona me animé a entrar.
Por primera vez tenía algo de prisa y se me dio por pedir una esas meriendas armadas. Pedí un süss kids (chocolate frío+cupcake a elección o panqueque con dulce de leche). El chocolate era cindor y el cupcake de maracayá de primera, el corazón de maracayá se ganó el mío. Evidente que para niños era.
Justo en ese momento estaba el pianista. Toca los lunes y jueves de 16 a 18 hs, estuve muy cerca de él y aún así escuchaba el barullo del ambiente. Obvio si queres disfrutar de eso y nada más que eso, anda temprano para conseguir mesa cercana a él. A su vez, todo el ambiente es en tono pastel y suele llenarse de parejas, mamis con niños y adolescentes. Si vas en grupo o con una amiga que ame todo lo rosado le va a encantar. Tienen un jardín muy lindo aunque con mesas pequeñas. Los martes cierran.
Consulte y tienen algunas opciones de pastelería aptas para celíacos (brownie, chipa, torta de chocolate, etc).

Süss o como me gusta llamarlo, La Gran Decepción de Martínez.
La comida es obviamente su fuerte, con infinidad de tortas, sánguches y canapés, todo rico y fresco. No probé el café pero me bastó con el té: es una locura que un lugar que se haga llamar casa de té no sepa preparar uno. Amargo e intomable como si las hebras hubiesen reposado un día entero en el agua, no sé cómo hicieron para arruinar un blend de Indra en cinco minutos pero lo lograron.
La atención fue amable pero despistada e ineficiente: nos tomaron el pedido para volver a los diez minutos y decirnos que teníamos que pedir otra cosa porque el brunch no se sirve hasta las 11 (un domingo). Luego, al pedir una tetera de earl grey me trajeron una de Taragüí común. El sandwich de pastrón estaba bien aunque nada del otro mundo, supongo que tendría que haber ido por las tortas que se veían bien y sustanciosas. El chipá es rico.
Un punto interesante: el lugar es bastante barato. Está ubicado en Martínez y es muy paquete, esto me sorprendió. Volvería porque me quedé con muchas ganas de probar el brunch, que tenía DE TODO. Aunque nunca más té.

Es un lugar muy agradable con una Deco muy femenina atrás tienen un patio que es un encanto, recomiendo las scons ! Son exquisitos tanto para comerlos con dulce como salados.
Me encanta !!

Suelo ir a Suss el lugar es muy cálido la decoración entre francesa y shabby chic bien femenina debe ser por eso que abundan las mesas de mujeres de todas las edades¡
Todo es rico tanto lo dulce como lo salado ideal para tomar el desayuno ó el té .
El café que sirven es buenisimo.
Siempre me atendieron rápido y bien .
Los precios son muy razonables y la materia prima de calidad.

Paseando por Martinez busque este café que me habian recomendado
Lugar: estilo francés con un lindo patio climatizado.
Atención: personalizada en el local o si uno pide para llevar
Menu: pedimos café y para acompañarlo nos tentamos con una iurresistible torta mousse de chocolate, de textura suave y con la temperatura justa.
Precio: entre 40 y 80 $
Lugar ideal: para tomar el té, ir con amigas, tias, madres y para llevar las tortas a casa o de regalo

Fui a desayunar un Sábado con mi marido y mis suegros.
El lugar es muy lindo, es una de esas confiterías/​café que tienen una decoración muy femenina, delicada pero divertida. Tiene unas mesitas delante, donde la gente puede ir con sus mascotas, y un patio atrás con jardín.
Pedimos medialunas con jamon y queso, dos scones dulces, pancakes (panqueques más gruesos) con arándanos y miel, una porción de torta (cheesecake de oreo), y waffles con dulce de leche. Para tomar pedimos una limonada, un frappuccino y dos cafés. Todo estaba muy rico, pero lo que más nos gustó fueron los pancakes, las medialunas y el frappuccino.
La atención fue buena, aunque se demoraron un poco.
Los precios muy adecuados, esperábamos pagar más por la zona y la calidad.
Volvería, lo recomiendo!

Como ya comentaron en otras reseñas, lo que más impacta de Süss es su ambiente y decoración rococó. En el salón y en la vajilla predominan los colores pasteles y el blanco, motivos con flores, etc. Si querés jugar a la princesa, andá a Süss.
El único punto negativo es que se llena de grupos de mujeres y el cotorrerío es incesante; en esos casos (y si hace calorcito) recomiendo ir al jardín, que tiene pocas mesas espaciadas entre sí y realmente es muy bello.
La carta tiene opciones dulces y saladas; podés ir por un desayuno, brunch, almuerzo, hora del té, lo que quieras. Es tan amplia que considero me falta probar muchas cosas, pero puedo afirmar que el café es rico (al café con crema le ponen abundante ídem), la pastelería es increíble (recomiendo el blueberry pancacke con miel, provoca éxtasis lingual) y el premio, para cortar con lo dulce porque nos da diabetes, se lo damos al scon de hierbas con jamón crudo y queso crema con ciboulette. Increíble.
Los precios están bien, la atención me pareció normal para estar tan lleno, y la frutilla del postre son los días que hay concierto de piano en vivo por la tarde.
Clave ir temprano y evitar el malón de gente. Volvería mil veces más.

Fui con una amiga en un día no ideal, y ahora aclaro por qué no la pasé bien.
El lugar es hermoso super fifí, todo rosita. Muy bien decorado, estilo sweet princess.
Ubicado a dos cuadras de la estación de tren de martinez.
Los mozos mmm bien hasta ahí, nuestro mozo estaba colgado en el limbo ese día, asi que le dejamos propina a otro mozo que tMbien nos semi atendió, y le escribimos en el billete que era un bombón, seguro ni lo leyó
Precios como cualquier lugar, nada muuy relevante, aunque notamos que se excedían con los precios de lo que tenía salmón. Y se notó bastante la diferecia:
Sandwich de jamón crudo $ 40 aprox
Sandwich de salmón rosado $ 120 (TE FUISTE A LA MIERDA PIBE!)
Comida buena, depende qué. Mi jugo estaba asqueroso. Tuve que agregarle azúcar, muy amargo, tenía menta y lima.
Las tortas son exquisitas pero explotas, super dulces. Ataque al hígado. Nosotras pedimos un cheescake de maracuyá y uno de óreo.
Probamos un muffin de salmon con hierbas ($ 30) chiquito pero muy bien preparado, riquisimo.
Mi problema es que justo el dia que fui estaba enferma de faringitis entonces no pude chequesr bien los gustos a los alimentos. Tip: no salgas a comer enfermo!!! No sirve, es como si una persona sin sentido del gusto salga a comer, fail mio.

A ver… fui a almorzar. No puedo decir que mi experiencia haya estado a la altura de lo que leo en las demás reseñas.
Llegamos 13:40. Nos sentamos y estuvimos esperando diez minutos que alguna de las camareras se acercara a la mesa. Lo conseguimos solo cuando le hicimos señas a una. Recién ahí levantaron lo que había quedado del grupo anterior y la chica nos dijo «ya les paso un trapo en la mesa»… No sé cómo decirles esto pero todavía estoy esperando que venga con el trapito.
Pedimos un tibio de queso y pollo, una ensalada Suss y un tostado de jamón y queso. Tardaron 45 minutos en traernos la comida. Para esta altura ya eran las 14:20. El lugar estaba lleno pero solo en la parte de adentro ya que hacía mucho calor y en las mesas de afuera no había nadie. Debía haber 10 mesas llenas en total. Para el tipo de comida que pedimos, tardaron una barbaridad de tiempo.
Lo califico con 3 estrellas porque la comida es muy rica y el lugar es cómodo y bonito y los precios están bien. Pero la atención fue pésima. No exagero ni un poco.
Dicho esto, el lugar tiene ciertos detalles que suman. En la primera hoja del menú aparece la clave de WIFI, te prestan un candado para la bici si te lo olvidaste, hay muchos cargadores para celulares… esos detallitos son fantásticos.
Tengo la sensación de que el hecho de que hayamos ido a almorzar en lugar de a desayunar o merendar tuvo que ver ya que otra de las chicas había ido en otras oportunidades a tomar el té y no había tenido que esperar tanto.

Si bien lleva la palabra cupcake en su nombre, no son el fuerte. Son secos y chicos. Nada en comparación con las tortas, porciones para compartir si o si. Las cheesecakes son el fuerte de la casa, junto con los scons, salados y dulces. El café de cápsula nesspresso. La hora del te es caótica, pero la atención en muy buena.

Re Lindo Lugar! No lo conocía, fui a merendar con dos amigas en un domingo de mucho calor y la verdad me encantó. Cerca de la estación de Martinez, una zona muy tranquila. El lugar es muy lindo, tiene un patio al fondo para los días lindos. Los asientos y las mesitas son acorde a la decoración del lugar. Están en los mínimos detalles. Incluso la carta es una monada. La atención de las mozas es muy buena considerando que ese domingo estaba lleno de gente. Saben esperar y te responden todas las preguntas que tengas sobre las diferentes opciones que hay. Probé el Smoothie de frutos rojos y un sanguche de pavita, un MIL para ambas cosas. Riquisimo.

El lugar nos encanto, fuimos por las recomendaciones que leímos en Unilocal sobre el lugar y definitivamente volveríamos a ir… Nos fuimos por la opción del Brunch y aunque nos pareció un poco costoso, me parece que la comida y la atención están a la altura, todo esta muy bien armado, me atrevería a decir que es toda una experiencia, desde la forma en como esta armado el menú, pasando por la disposición de las mesas, sillas, decoración, la forma como entra la luz al lugar, todo esta muy bueno! Espero poder regresar pronto!

No puedo decir mucho mas de lo que dijeron los que ya probaron la grandeza de Suss.
Fui un domingo a la tarde. Llenisimo! Pero éramos dos y por suerte no esperamos nada. En caso de que un domingo, el clima esta lluvioso y son mas de 3 es muy factible que tengas unos largos 20 minutos esperando en un costadito.
Parece que entras a una casa de muñecas. Todo rosa, vintage siempre girly y clasico.
La atención es impecable aún estando minado de gente.
Fanática de Harry Potter me pedí un te de sauco exquisito que me anonadó (TEMEDME MORTALES, AHORA SOY VOLDRMORT) y unos chipa excelentes. Pero es muy difícil elegir entre toda los productos pattiserie.
Lo que te sorprende son los precios, pensé que iba a ser relativamente caro pero gaste alrededor de 50 pesos. Mi amiga se pidió el frapuccino Suss y una porción de torta y no gasto mas de 70 pesos.
Hay un piano y los días miércoles un señor toca en vivo. Excelente para los que le gusta la música clásica como a mi.
Finalizo diciendo que es muy lindo ir con amigas pero… Muchachos, no se pierdan de los manjares que tiene esta casa femenina.

Mediante los usuarios de esta red descubrí Süss y la verdad es que fué un hallazgo increíble, así que gracias a quienes lo recomendaron porque no exageraron ni un poco.
Este café está ubicado en una callecita lateral, a metros de la calle Alvear en Martinez, es una zona muy linda y tranquila. La decoración impecable, muy cálida sin estar recargada. Fuimos un domingo de lluvia, así que el lugar estaba repleto de gente que además al no poder hacer uso del patio que tiene atrás, estaba toda agolpada adentro. Aún así, no esperamos demasiado por una mesa ni por el servicio, todo rápido y eficiente. Lo único, un poco ruidoso, pero nada grave.
Tiene opciones armadas, individuales, para compartir, muchisimos blends de té y varias opciones dulces y saladas, una más tentadora que otra. Yo probé un cheesecake de chocolate y un cupcake de frutos rojos que estaban deliciosos.
Además del servicio, me gustó que la carta era amplia y se explicaba por sí sola, en la primera página te dice el horario, en que días hay acompañamientos de piano y también te da la clave de wifi escrita, un lujo!
Definitivamente voy a volver porque me quedaron varias cosas por probar que parecían muy tentadoras, el brunch es una de ellas.

Ubicado en la parte mas linda de Martinez. El lugar es simplemente hermoso y delicado. Ideal para pasar una tardecita de verano en el jardín con amigas.
Algunos días suelen usar el piano y durante la tarde el pianista hace que todo sea mas lindo.
Los brunch son una perdición, incluso su cerveza.
Sus cosas dulces no son recomendables si estas a dieta. A tener en cuenta que las porciones de torta son enormes y se pueden compartir tranquilamente.
Para la gente que tiene diabetes o es
celíaca tienen un menú y cosas solo para ellos.
La mejor chocotorta la he probado acá.