Por Ayacucho hay otra casa de fotografía, pero no hay duda: siempre voy a preferir Saladillo Color. Cuando llegué al barrio, Saladillo Color estaba ubicado en otro local comercial, más pequeño, en la vereda de enfrente, pero si ahora me preguntan, no puedo poner el dedo en cuál era exactamente. Lo atiende el matrimonio que es propietario del local, son dos divinos(ella es más tímida que él) y si te cruzan por la calle un día cualquiera te saludan siempre. Aunque hubo una época en la que iba muy seguido, no sé sus nombres, así de pésima soy; sí sé, en cambio, que él es uno de los promotores del Centro Comercial Ayacucho. Como en toda casa de fotos, venden álbumes de diferentes formatos y portaretratos. Imprimen fotos desde rollo y digitales, en el momento(que son más caras) y de laboratorio. Sacan fotos carnet y la última vez que fui por eso tuvieron la amabilidad de generarme una plantilla con mi foto carnet reproducida un montón de veces, «así la próxima vez que necesités venís con eso, lo imprimimos en una sola hoja fotográfica y tenés muchas fotos»(era la época en la que yo estaba mandando CVs a diestra y siniestra, se ve que se apiadó de mí). Además los chicos son fotógrafos y hacen fotografía y filmaciones sociales. Y el plus: también traspasan cintas de VHS a digital.