El Ganso y la Parrilla

Se demoran mucho y además traen la carne casi cruda a la mesa. La acústica es terrible, es como estar dentro de un gallinero.

El nombre no tira mucho. Publicitariamente suena contraproducente y antiestético, pero había que probar que tal andaba El Ganso y la Parrilla, aunque su apelativo fuera un anzuelo que no picara en ningún río del planeta. Aquí ya partimos con un quiebre entre este lugar y su competencia más cercana, el local «Hambre». Los tragos son más baratos en comparación al otro lugar y su cocinería tiene más relevancia, con platos simples, pero que llenan hasta el más profundo de los estómagos.
Generalmente mi predilección va por el lado de la mechada con arroz o puré ($ 5.300), y un shop de cerveza artesanal, de medio litro ($ 2.000).
Digamos que no es barato, y aclaremos que no es una picada tampoco, pero la sofisticación del lugar, y el derecho a coqueteo con sus guapas meseras, valen muy bien las lucas, al menos una vez al mes.
Otros precios:
Bife pobre $ 5.800
Salmón con agregado $ 5.300
Risoto Camarón $ 4.500
Mechada fettuccini $ 5.000
Lomo liso con agregado $ 6.700
Cesar pollo $ 4.000
Ensalada de salmón $ 4.200