Llegué a este local porque acompañé a una amiga a un cumpleaños, así que fui la paracaídas de la noche, y en verdad, lo pasé bastante bien, un espacio cómodo relajado, con karaōke y a precios bastante buenos para el bolsillo. Acá podrás comprar las memorables y nunca mal convenientes chelas de litros, el local también cuenta con una carta de tragos preparados y para comer, en caso de que tanto canturreo te abra el apetito. Si te gusta cantar o eres un cantante frustrado o en potencia, sólo deberás escoger la canción y creerte toda una estrella arriba del escenario, ten por seguro que todos cantaran contigo. Es recomendable llegar temprano, ya que Tavarúa recibe a mucha gente, por lo que si tardas es probable que te quedes sin una mesa. Si vas en auto el sector de Manuel Montt cuenta con estacionamientos, por lo que no es problema ir en él, eso sí, si bebes, no olvides de entregar las llaves.
Cristina C.
Évaluation du lieu : 3 Santiago de Chile, Chile
Cuando conocí este local fue con unos amigos, uno del grupo lo nombro para el punto de reunión, hacer la previa de un cumple y después ir donde el festejado. Es un poco pequeño, pero en realidad no es necesario más espacio, ya que el lugar esta hecho para un grupo pequeño de personas que solo quiere ir a tomar se un trago y cantar. Eso fue lo único que me incomodó, no me gustan muchos los karaokes(me da vergüenza cantar), lo bueno es que no te obligan y no te dejan en ridículo por no querer hacerlo. El rango de los precios esta dentro del promedio y no es para ir en auto ya que no hay estacionamiento, y además que después de un par de tragos no quedarás en muy buen estado jajaja…
Isabel A.
Évaluation du lieu : 3 Santiago de Chile, Chile
La primer vez que fui al local era el 2010, sí, hace demasiados años atrás, cada cierto tiempo me doy una vuelta por ahí, el plus de esté lugar son las personas que atienden, te hacen sentir como en casa, en familia, como si ellos fueran parte de tu grupo de amigos, un punto no menor si tomamos en cuenta que el fuerte es el Karaōke y cuando de cantar en público se trata la vergüenza es más grande, pero no, acá es diferentes ellos, los meseros, el que hace el trago, el animador, todos cantan, lo hagan bien o mal y cuando te toca a ti, el miedo y la ansiedad ya no es tanto. Los tragos no son ninguna maravilla, he probado mejores, aunque las piscolas son contundentes, un punto importante, es un lugar pequeño y se llena rápido, recomendable solo para la previa.