Hay dos tipos de personas: las que son atrevidas y cambian continuamente de pelo y las que no. Yo soy de las segundas. De las de melena larga permanente y cambios… ¡Los justitos! Ahora bien… Una melena larga puede ser anticuada o moderna depende de quién te la corte. Yo había probado varias peluquerías del barrió Gótico por aquello de que siempre buscas una que esté cerca de casa. Pero… ¿El resultado? ¡Nunca salía contenta! ¡Nunca! Tenía ganas de ir a una peluquería que me diera la confianza de que saldría contenta aunque tuviera que pagar un poco más. Y finalmente… ¡Ese día llegó! Un amigo estiloso y con muy buen gusto me aconsejó Biguidi y fui. Son unos profesionales de la imagen y me aconsejaron sobre lo que me quedaría mejor. Se notaba que sabían lo que hacían y me atendieron de perlas. Salí muy contenta y se ha convertido en mi peluquería oficial porque, aunque tenga que desplazarme de mi barrio para cortarme la melena… ¡Yo lo valgo!