Cinesa

Fiesta del cine!!! creo que soy una fan de esas promociones ya que durante el resto del año encuentro excesivo el precio a pagar.
Heron City hace tiempo que compactó las taquillas con la venta de palomitas por lo que a veces se arman colas innecesarias donde la gente que no sabe si quiere palomitas dulces o saladas se mezcla con los que no saben qué película coger.
En el caso de la semana pasada yo ya había comprado las entradas por internet así que simplemente tuve que dirigirme a la entrada directa.
Los cines para mi gusto están bien (siempre tienes las butacas Premium a un euro más) … quizá no tienen las últimas modas en asientos reclinables pero suelen verse con gran calidad las películas y con un buen sonido.
Supongo que los fines de semana suele haber más gente pero entre semana es bastante común encontrarte en la sala con cuatro o cinco personas… lo que hace que puedas estar a tus anchas.

¡Qué noche, la de aquél día!
Salía yo del Cinesa Heron City algo decepcionado (no es el tipo de cine que me guste, tanto por el multisala como por el cine palomitero doblado que ponen) y de repente una chica de producción me dice que buscan extras para salir en una escena que van a rodar allí mismo. Y a mí que me gustan estas cosas, voy y me apunto.
Estuvimos toda una noche rodando, primero en las taquillas del cine, muy grandes y amplias, por cierto, y luego en la propia sala, en la que se suponía que los protagonistas, un ciego, un cojo y un sordomudo veían una película.
Los ratos muertos los pasamos en la cafetería del cine, con algo de catering mientras por ahí se paseaban Fernando Tejero y Santi Millán dirigidos por Joaquim Oristrell.
Fue una de esas noches tontas que se te acaban complicando.

Una de las experiencias más raras la tuve en este cine hace años, cuando todavía iba a salas comerciales. Fui a ver una peli de María Valverde y no se les ocurre otra cosa que doblarla toda al catalán. Algo realmente raro…
El resto de cosas están bien, hay un entramado de escaleras mecánicas para acceder a tu sala que me parece bastante curioso. El precio es el que es: caro. Las pelis son familiares y comerciales, aunque también tienen programación en VOSE. No está mal para una tarde de palomitas.

En la Meridiana, pasada ya la estación de tren de Sant Andreu Arenal, levantaron hace unos años un centro comercial visible por su gran torre de néón violeta, que auguraba a la ciudad un futuro cyberpunk. A la sombra de la torre hay un multicines en tres plantas naturalmente vendido a las majors y al espectáculo, que colma las necesidades palomiteras de Nou Barris y Sant Andreu. Son salas cómodas, bien sonorizadas, propias de un lugar como aquél, tan excesivo en muchos aspectos, tan engañoso en otros.
Un gran punto a favor son sus sesiones matinales que cubren esas horas muertas de domingo a mediodía, en las que en ocasiones apetece meterse en un cine. Con una buena selección de horario nos aseguramos una cierta tranquilidad y agradable sesión, en un entorno horrible pero al que muchos vecinos podemos llegar andando. La última gran película que vi en el Heron fue Scott Pilgrim, esa obra de arte desenfrenada, y tengo que reconocer que se adecuaba perfectamente al lugar, tan saturado de colorines y tan artificial. Todo tiene su momento, ese dantesco monumento al consumo también.

16 salas de cine a un precio para mi bastante elevado (8,10 € en festivo). Se encuentra en un centro comercial que te puede permitir pasar una tarde de compras y ocio.
Los asientos son bastante cómodos pero deberían mejorar la iluminación de los números de los asientos porque no se ven con la peli empezada.
El sonido y la imagen son muy buenas.

Esto cines emplazados en el centro comercial Heron City cuentan con el total de 16 salas.
En el vestíbulo encontraremos, un Bocatta, una tienda de helados, y otra tienda de palomitas y chucherías varias. Además, en la segunda planta hay otra puesto de palomitas. Estas tiendas de variedades nos cobrarán los productos muy caros, excesivamente caros.
Los asientos de las salas, son relativamente cómodos, aunque los posa brazos no se levantan. Lo malo, es que los asientos están fatalmente señalizados, cuando la sala está oscura, es difícil encontrar tu asiento.
Las pantallas son grandes y el sonido bueno.