Su nombre completo es Gemma Baulies i Romero, pero todo el que la conoce y trata la llama simplemente Gemma. Es una mujer encantadora y afortunadamente la primera y ultima impresión con ella es que no parece un medico sino alguien de la familia. Te escucha y tiene muchísimo respeto por los niños que es su especialidad desde la vertiente homeopática. Esta siempre en comunicación en caso de consulta o emergencia con una llamada de teléfono que te devolverá rápidamente si esta despierta. A veces pienso que no debe dormir porque me ha devuelto llamadas a todas horas. Pero cuando vas a su consulta previa cita, se toma con mucha calma atender a cada uno de sus pacientes. Además como es común en este tipo de consultorios hay juguetes y espacio para que los pequeños se entretengan mientras dura la espera. Puede parecer un poco costoso en principio pero se compensa sobradamente con su dedicación y disponibilidad.