¿Qué queréis que os diga?, es el lugar en el que me hice mi vestido de novia… sí, sí, ya sé que suena muy tradicional, pero espera, tampoco tanto, Jordi Anguera tiene todo tipo de estilos y enseguida me «pilló» cuando le dije que quería ir muy sencilla y con un traje poco convencional, poco de «novia» para entendernos. ¿El resultado?, un vestido que si un día me da por romper su blanco plomizo y pintarle o añadirle color, se convertirá en un vestido de fiesta. Me permitió traer la tela y cumplió con el diseño y los plazos de entrega, evitándome sufrimientos. Allí también compré los zapatos y tiene más complementos(broches, velos, tules, decoración para el pelo…).