Como las cosas en casa han cambiado mucho en los últimos tiempos, porque somos más, tenemos menos dinero y nos plantemos alternativas para nuestra vida y nuestra manera de consumir, entonces La Mamavaca es el sitio para buscar cosas muy especiales para nuestras enanas. Cuando nació Amanda, pedimos a quién quisiera y pudiera, unos pañales de esos de los de antes que se deben estar lavando después de cada deposición. Y aunque suene un poco raro la idea partía de no malgastar dinero en muchos pañales desechables que además contaminan a saco. Y así es como de La Mamavaca llegaron a casa pañales y alguna cosa más(ropa y cosmética de baño) que nuestros amigos cercanos regalaron a la nueva pequeña de la casa. La gama de colores y las posibilidades de combinaciones que con los pañales se pueden hacer es impresionante. Y basta con explicárselo a una abuela, que conoció el tema de la lavadora infinita de esta prenda infantil. Se quedan de piedra al reconocer que uno vuelve por esos caminos.