Évaluation du lieu : 4 Montornès del Vallès, Barcelona
Es una pastelería situada en la zona del Clot, fundada en 1922 y familiar, donde todos sus productos son de elaboración propia y diaria. Es confitería, pastelería y bomboneria, además que también preparan caterings. Pasó cada día y es una tentación diaria de entrar a comprar algo. Todo lo que he comido de allí está muy bueno. No es una pastelería barata, pero se nota la calidad de los productos elaborados por ellos. A destacar también los productos que realizan en fechas destacadas, como monas, turrones, cocas, etc. Muy recomendable si tienes algún evento en el que prefieres ofrecer buena calidad.
Rosa P.
Évaluation du lieu : 4 Barcelona
Estaba buscando una panadería donde poder comprarle a mi novio una mona de Pasqua. Él no es catalán, así que pensé que le haría ilusión. Problema, la mona tenía que sobrevivir a un viaje de 7 horas en bus y además la quería pequeñita, por lo de que nos la comeríamos entre los dos, y por lo que son muy caras, y cuanto más pequeña, más barata. Casualmente pasé por delante de esta panadería, hace esquina y su espectacular escaparate no pasa desapercibido. Infinitas monas de pasqua, tanto los pasteles en si, como las figuras de chocolate. Entré para curiosear, estaba bastente llena y voilà, encontré una mona ideal. 4 euros una mona minúscula. Luego pensé que quizá era demasiada minúscula, así que le compré otra un pelin más grande. No exagero si os digo que en 4 bocados te comías la mona entera. Además con 3 plumas de colores, un huevo de chocolate y un pollito la mar de mono. Con tanta MONERÍA, salí de esta panadería más contenta que unas PASQUAS.
Mireia B.
Évaluation du lieu : 3 Barcelona
En Cataluña tenemos una tradición muy arraigada para el lunes de Pascua. Se trata de comernos la «Mona», un pastel acompañado por una figura de chocolate. Esta figura es la protagonista de la celebración y a veces hasta se considera una«obra de arte» por su complicada elaboración y originalidad. En La Palma encontré la Mona para mis sobrinos. Y a pesar de que está hecha con moldes para ellos es la más bonita del mundo. Un balón de chocolate blanco y una figura de plástico de Messi, plumas de colores y dos pollitos amarillos. En esta pastelería familiar del barrio del Clot ya había comprado varias veces anteriormente, siempre quedando contenta a pesar que las dependientas no destacan por su simpatía. ¡Quizás están hartas de tanta«dulzura»!