Tuve que acompañar a una amiga que le comprara un regalo a su sobrina. Paseando por carrer Asturias encontramos Lula a mi ya de entrada el nombre me parece de lo más molón! Al entrar y echar un vistazo a un más me gustaba su nombre, la tienda, todo! Ropa para pequeños llena de colores, fantasia, alegria, una energía infantil me atrapo… después se la recomendé a unos cuantos padre y madres amigos que tengo por ahí y todos me han dicho que ha sido un gran descubrimiento. Así hasta entran ganas de tener… SOBRINOSSSSS!!!
Mariona R.
Évaluation du lieu : 2 Barcelona
Porque está rodeada de tiendas de moda de diseño propio y porque tiene un escaparate resultón, esta tienda de ropa infantil promete más de lo que es. Seguro que si hubiera estado en otro barrio, no me habría decepcionado, pero ahí en el meollo fashion de Gracia, me esperaba algo más original. No tiene nada de malo, ni de bueno, ese es el problema. Es una tienda de ropa infantil de marcas estándar presentada de forma más o menos correcta, quizás un poco desordenada, ahora que lo pienso, pero que tampoco molesta. Los precios dentro de lo que se espera, pero nada ahí dentro te invita a comprar. Como he dicho, nada en contra, pero tampoco a favor. Ni fu ni fa.
Enara S.
Évaluation du lieu : 5 Barcelona
Entrar en la Libelula es como entrar en un mundo de fantasía creado para niños. La tienda es pequeñita, y esta llena de colores, de juguetes, de fantasía. Cada vez que se acerca el cumpleaños de algún sobrino me acerco a esta tienda. A parte de ropa, tienen juguetes muy curiosos, imaginativos, y además la gran mayoría son educativos. La chica que lleva la tienda es muy amable, las veces que he ido siempre me ha ayudado a elegir el mejor regalo. Los precios no son muy baratos, pero merece la pena porque siempre se encuentra cosas originales que seguro que les encantarán a los mas pekes de la casa.
Raül R.
Évaluation du lieu : 4 Barcelona
Bonita tienda de ropa infantil, en pleno Gràcia. ¿Qué venden? Sobre todo, ropa para bebés o niños hasta unos ocho o diez años, juguetes sencillos de aire retro, zapatos elegantes, pequeños complementos o accesorios… Compramos unos baberos que parecían pañuelos de San Fermín, muy originales y diferentes. Es muy visual(creo que ordenan la ropa por colores) y aunque tanto la tienda como el escaparate son muy pequeños, entre la iluminación y los colores, dan ganas de entrar. Acostumbra a ser un estilo de ropa entre clásico y cool(si eso quiere decir algo o me lo estoy inventando, tendréis que ir para comprobarlo). La ropa es de calidad y por eso no es barata; para hacer un regalo es ideal. Las chicas que la llevan son muy amables, hasta te aguantan al niño/bebé para que puedas mirar bien lo que tienen, y saben vender. Así que ya podéis ir preparando el billetero y un poco de espacio en el armario del niño/niña/bebé, porque será difícil que entréis y no les compréis nada.