Es una pena pero la ultima vez que estubimos en el Mitsuki el servicio fue muy lento y la camarera parecía haberse olvidado de nosotros, la verdad nos trajo los platos desordenados, los segundos primero y los entrantes al final. La verdad ella misma de dió cuenta que estaba siendo caótico pero no atinó a emitir unas disculpas formales, se notaba que estaba nerviosa porque derramó la salsa de soja por la mesa, en ningun momento dejamos de ayudarla en todo, no realicé ninguna queja ya que supongo que era un dia muy concurrido. Espero volver y dejar otra reseña mejor, pero me quedé un poco decepcionada,