¿Qué pasa cuando te quedas en la ciudad un fin de semana con niños ansiosos de planes y ganas de quemar energías? muchas cosas… pero ¿y si llueve… mmmmm…la cosa se pone difícil…¿cine…no, creo que ya las hemos visto todas…¿museos…los de niños ¡todos visitados…¿reunión con amiguetes con hijos… están todos fuera… arghhhhh, ¿qué hacer… ¿Solución?, llévatelos a ver un espectáculo de magia. Se lo van a pasar de maravilla(y tú también) y conseguirás que durante una hora larga, tu prole se quede con la mirada fija en el escenario. Eso sí, hay que llegar muy puntual porque la sala es pequeña y se llena enseguida, con lo que te quedarás en las filas de atrás y los niños se perderán la posibilidad de que el mago interactúe con ellos.