Dimi

Heladería familiar situada en el paseo de la playa del Puerto de Mazarrón. Los helados son artesanales, de fabricación propia y están bastante buenos. A parte de las típicas tarrinas, tienen copas de helado bastante llamativas.
Diría que tienen unos 20 sabores de helados, que está bien pero no llega a ser tanto como alguna heladería italiana con 40 sabores, por lo que si te gusta algún sabor raro igual lo echas en falta.
Dentro del local tienen pocas mesas, pero lo mejor es sentarse en la terraza justo delante de la playa, sobretodo se está muy bien por la noche en verano, aunque se llena bastante, pero es normal dada la ubicación.
A parte de los helados, hacen tapas y bocadillos de calidad aceptable como para ir a comer o cenar alguna vez.
El servicio es correcto y el precio no es caro, siempre en función de la complejidad de la copa de helado, pero no te vas pensando que te han sablado.