Campos

Vas paseando por la calle y. ¿Qué es eso?
Te paras.
Huele a… Mango… Manzana… Pera… Naranja… Plátano… Piña…
Buscas a tu alrededor, cuando descubres que el olor viene de una tienda que has dejado dos pasos atrás.
Decides volver atrás… ¿Desde cuando hay aquí una frutería? Realmente no esperas una respuesta. Lo único que esperas es tener dinero en la cartera porque la pinta que tiene la fruta habla por sí sola.
Lo último que compré hace un par de semanas fue una batata ya asada y todo… pero la verdad es que me decepcionó un poco el sabor. Para mi gusto le faltaban un par de minutitos de horno!
Me encanta la fruta, aunque debo admitir que no soy yo de comer demasiada… pero es que con frutas así, te entran ganas de llevarte media tienda a casa y basar tu alimentación en macedonia!

Esta frutería no lleva mucho en la calle Santa Cecilia, pero desde el primer momento me sorprendió cómo supo atraerse una buena clientela. Mira que hay un par de negocios de este tipo que ya están más que asentados y tienen compradores bien fidelizados, pues algo harán muy bien para que muy pocas veces la veas vacía…
El género es bueno, atienden rápido (hay dos o tres dependientes), el local es amplio… y ¿los precios?, más o menos igual que en todos sitios aunque puedes coger buenas ofertas. En su época tienen batatas asadas que son realmente deliciosas y te ahorras trabajo y lo que cuesta el horno… ¡Una buena opción para llenar tu hogar de alimentos frescos y ricos ricos!