Mi amiga Lola se casa en mayo de 2012, pero aunque a mi me parece que queda muchísimo ella va con prisas a todas partes. Supongo que como no me hacen ilusión las bodas… Paseando con ella por el centro viendo tiendas de novia(que es algo que últimamente se repite demasiado… a ver así como consigo yo un marido…) nos encontramos con esta floristería que a mi me encantó. Es una tienda pequeñita pero me gustó mucho. Tiene una escalera de madera llena de flores y mil cuadros con fotos de novias en la pared. Estuvimos preguntando precios y no nos pareció caro. El señor que atiende es muy amable y nos escuchó a las dos cotorras como una hora«bla bla bla» pacientemente. A mi nunca me gustó que me regalaran flores, no se por qué… pero las floristerías me parecen preciosas. Quizá un día monte yo una.