Severs

Restaurante, bar, cafetería, hamburguesería, lugar de encuentro, punto caliente para ver el fútbol los domingos ¿algo más?, seguro que sí. Donde esté el Severs habrá gente y futboleros, porque desde que lo abrieron hace ya unos años siempre lo veo llenito, sus pantallas enormes por todo el local atraen a los amantes del esférico rey y otros aficionados variopintos. Creo que su truco es que tienen comida rápida un poco más elaborada y para todos los bolsillos y que es apto para todos los públicos.
Puedes elegir entre varios menús: desde uno muy sencillo con hamburguesa, patatas y bebida, hasta uno ya más currado con entrantes, postre, café, y si me apuras copa, puro y vals. También hay menús para grupos con sangría y platos a compartir que salen bastante económicos.
He ido a tomar algo varias veces y tienen azúcar moreno (a la lista, ¡bien!) para el café. En cuanto a las hamburguesas, son cañeritas, o sea que van bien rellenas de ingredientes y acompañadas de sus patatas a rebosar en el plato. Tampoco me parece una cocina digamos espectacular, pero sí resultona para una reunión informal con amigos, cenas de grupo o cumpleaños.
Mi novio ha ido muchas veces con sus amigos por las pantallas y los hamburguesones, lo más sencillo a veces es lo que triunfa.
En una ocasión estaba buscando sitio para organizar una despedida de soltera y pregunté. Me ofrecían un menú sencillo (a base de hamburguesas, bocatas, sándwiches etc) con barra libre, postre y copa, por no más de 17 euros, y para este tipo de eventos creo que es muy razonable. Al final nos decidimos por otro sitio más céntrico, pero creo que vale la pena echar un vistazo y que os arreglen un precio si estáis buscando un local informal al que ir. El trato es amable y la gente que lo lleva joven, se nota que saben llevar bien su negocio.

Para mí: SEVERS = Cerveza+Hamburguesa+Fútbol. Aunque no es justo simplificar tanto, tienen otros platos (ensaladas, sandwiches), menú al medio día y también una terraza desde donde se puede ver el fútbol… o no! Las hamburguesas están bien de tamaño y tienen un aliño que las diferencia. Eso sí, si queréis ver el fútbol, mejor reserva tu mesa porque es muy frecuente que se ponga a tope.

El fútbol es una religión y uno de sus mandamientos es que está prohibido ver un partido sólo, triste y aburrido en casa. Como más se disfruta es con amigos y en un bar por aquello de estar todo el mundo centrado en la pantalla y no en hacer la cena. Y aunque en las tablas de la ley del fútbol no lo ponga todo ello acompañado de una buena cervecita fresquita termina de arreglar un cóctel perfecto.
Hace relativamente poco tiempo descubrí un sitio perfecto para ver partidos, el Severs. En un local que aúna lo bueno de ver el partido en casa y el un bar. ¿Qué es lo que echas de menos cuando sales a ver un partido fuera? El sofá no? Pues en este local no lo añorarás porque tiene repartidos por todo el comedor unos estupendos sillones donde poder sentarte a disfrutar de un buen match.
Otro de lo atractivos que tiene este restaurante es su dueño, un argentino encantador. El otro día tuvo un detalle con nuestra mesa. Una pizza le había salido un poco fea de aspecto y nos la puso para picar sin cobrárnosla. Puede ser una tontería pero el detalle la verdad es que me gustó mucho. En cuanto a la comida la carta se basa en comida informal como salchichas, bocadillos y hamburguesas. Recomiendo sobre todo estas últimas, llevan mil ingredientes y están muy buenas.
El precio es muy correcto, es barato y otra de las cosas buenas que tiene es que después de cenar te puedes quedar a tomar una copa tranquilamente allí porque cierran tarde. Ah! casi se me olvida, tienen wifi gratis para los clientes.

Es de esas cosas que de antemano esperas que no sean lo más de lo más, pero que siempre pueden sorprenderte de cutre manera…
Desde fuera, parecía un sitio de estos de tapeo y copas donde la gente que ya tiene el pelo más blanco que negro entra a ligar un poco y a sentirse en su habitad natural… pero ya dentro, la experiencia es indescriptible…
No es que el aperitivo estuviese mal, ni que estuviese caro, solo que cuando entramos mi novia y yo, éramos con diferencia los más jóvenes del sitio… con diferencia los menos fashion victims del sitio y con diferencia los menos esperados… a tal punto que creo que creyeron que fuimos de ocupas a usar el baño, porque casi 10 min después de entrar, me levante a pedir y la «chica» de la barra me dijo «ahhhhh, vais a tomar algo»…no preguntando sino sorprendiéndose…y luego el «chico» de la barra, después de pasearse con un platito de chuches en la mano mientras iba de mesa en mesa, cuando nos íbamos, nos hizo saber que dichos chuches eran para nosotros…
Datos interesantes: En días de futbol (a los que les gusta) debe ser una locura, porque no tienen ni una ni dos pantallas… tienen 8 pantallas pa ver el futbol…
Y si vais, por favor id al baño y fijaros en el los distintivos de hombre y mujer… en el de ellos un Ken hippie/​indie y en el de ellas una Barbie hippie/​indie…
Aquí la única escena de película que se me ocurre es a Van Dam con el corte de pelo de Puyol y una camiseta del barça dandose de hostias con el Esteven Segal disfrazado del Cristianito Ronaldo… esque no da pa más.