Si quieres probar el lechón al puro estilo Yucateco, este es el lugar, cocinado al horno con el sabor perfecto, la carne tan tierna que se deshace y con la piel dorada, como le llaman, «costra» tan deliciosa que no puedes dejar de comerlo, acompañado de la típica salsa de habanero y la cebolla morada encurtida, es simplemente suculento. Nosotros encontramos este lugar de casualidad, un día de prisas que no hubo tiempo de desayunar en casa, originalmente pensábamos comprar algo de pasada, lo vimos abierto y decidimos probarlo, y no nos arrepentimos, bueno, un poco, porque después de probarlo queríamos ir casi todos los días a desayunar ahí, y no es lo más sano que digamos, para una que otra vez esta bien, pero a la larga te puede cobrar factura. También ofrecen para llevar y por kilo, en comparación con otros lugares, considero que sus precios son baratos y también ofrecen servicio para eventos, lo recomiendo muchísimo para que prueben un lechón como ningún otro.