Módulo Trámites Vehiculares Central

Qué día tan horrible viví cuando tuve que ir a este lugar a hacer el cambio de propietario de mi coche. Gracias a ello, me declaré oficialmente tramitofóbica (fobia a los trámites).
Sé que estos procedimientos son largos pero no sabía que eran eternos. Lo peor es que son inevitables y nadie puede escapar de ellos.
En sí, el servicio es bueno, me refiero a que te explican bien y claramente lo que debes de hacer y te ayudan. Pero definitivamente tienen que solucionar el problema de la espera.
Primero que nada, para hacer el cambio de propietario únicamente es en este lugar. Lo bueno es que para renovar licencias, hay otros módulos donde todo es más rápido.
Pero aquí tienes que llegar a las 6 o 7 de la mañana a hacer cola hasta que abran y te den una ficha. Si se acaban las fichas, te fregaste y tienes que regresar otro día para volver a hacer cola.
Además, obviamente tienes que llevar tu coche pero adivina que, no hay donde estacionarlo. Tienes que caminar un montón para estacionarlo y luego ir por él cuando lo necesiten. Luego, esperar, tramitar, esperar y volver a tramitar. Todo el show dura una seis horas y no puedes irte porque no sabes cuándo te va a tocar el siguiente paso.
En fin, la única recomendación que puedo hacerte es que vayas a este lugar con un set de entretenimiento: celular cargado al 100%, un buen libro, revistas, música o hasta la Biblia. Lo que quieras que puedas usar unas seis horas para no aburrirte y que la espera se te haga infinita.