Nevería La Fuente

El establecimiento esta muy bien ubicado ya que se encuentra frente al templo expiatorio y afuera del local esta la explanada del templo donde la gente sale a sentarse en las jardineras después de comprar su nieve o también tiene un amplio espacio el local para comer ahí dentro.
El servicio de los empleados normalmente es bueno aunque en ocasiones me a sucedido no se si es porque tienen mucha gente o que sea que pero su atención deja mucho que desear, pero dejando de lado eso las nieves son muuuuy ricas tienen una gran variedad desabores todos los que he probado son muy buenos, mis sabores favoritos son coco, vainilla, chamoy, rompope, guanabana y nuez.
Para mí es un muy buen lugar para disfrutar de una rica nieve y una bella vista.

Frente el templo Expiatorio se encuentra uno de mis lugares favoritos y que más frecuento últimamente, no se diga en tiempos de calor. Cuenta con una amplia gama de sabores que van desde los comunes como: Jamaica, coco, fresa y tamarindo hasta los exóticos como: tequila, mamey, cajeta o un picosito diablito. Lo que más me gusta de este lugar aparte de su cantidad de sabores es que en general todos tienen un sabor muy natural además de que incluyen trozos de fruta como la de mango o la de durazno y si hay algo que puedo reclamarles es que aquí he probado la peor versión de nieve de tamarindo, puesto que es una de mi favoritas. El local cuenta con algunas mesas y sillas para que puedas comer tu nieve cómodamente a la vez que tienes una excelente vista al templo expiatorio y su explanada. Los precios son: la grande 20 pesos y la chica 15 pesos.

Desde pequeña he ido al parque Morelos a comer nieves raspadas, pero de unos años para acá, el estacionamiento es cada vez más complicado, por lo que cuando descubrimos esta sucursal frente al templo Expiatorio, nuestro gusto por los rapados renació.
Aquí encuentras la misma variedad de sabores que en la matriz del parque Morelos. Los tamaños son también varios para satisfacer cualquier tipo de antojo, así sea un antojo que deseas complacer en la sucursal o llevarte el raspado para tu casa.
Abajo de la explanada del Expiatorio, hay un estacionamiento enorme que pueden usar quienes deseen, así que para la facilidad de los clientes esta es una buena opción.
Aunque si prefieres no pagar tanto y confías en tu suerte, al rededor quizá puedes encontrar lugar.

Que me acabo de enterar que son los mismos de las famosas nieves del parque Morelos…
Esta sucursal se encuentra enfrente del templo Expiatorio, perfecto para salir de misa y comerse un rico raspado o si no vas a misa (como yo) no importa, no hay necesidad de pretextos.
Tienen muchas banquitas en el interior para sentarte a comer tu nieve muy agusto y platicar o a ver la tele, porque tienen una. Lo mejor de este lugar es que son muy rápidos para atender aunque haya fila, nunca tardas tanto en pedir tu raspado.
Mi recomendación: los raspados de fresa con coco, son deliciosos.