Fratello’s Pizza

Estuvimos toda la tarde dando vueltas por el centro, buscando primero una mugre marquesita (mugre porque fue horrible lo mucho que nos tardamos en hallarla), y luego más vueltas na’ más por que sí. Ni nos dimos cuenta cuando nos agarró el hambre pero veníamos de regreso sobre la 60 cuando vimos este lugarcito abierto.
Llama mucho la atención porque no parece una pizzería. Tienen cantidad de cositas hermosas adentro, y si no fuera por el letrero, pareciera más un bazar que otra cosa. A mí me llamó mucho la atención la ropa que tenían en dos o tres diferentes racks. Tenían discos, pinturas, fotos, esculturas raras y cantidad de otros artilugios indescriptibles que llenan el lugar.
Sobre la pizza: rica rica, delgadita, tostadita y con excelente sazón. Los ingredientes están rarísimos riquísimos. COCHINITA, chaya, quesos mil. Y las típicas clásicas hawaiiana, peperoni, etc.
Ese día pasamos bastante tardecito y aún así había su variedad para escoger.

Galerías, pizzerías y tiendas de souvenirs o de manualidades hay varias, sobre todo en el centro de la ciudad, pero este negocio te ofrece los tres juntos muy en esa moda de lugares multifacéticos.
No podría decir que es más uno que el otro porque la verdad es que el lugar está plagado de artículos, cuadros y del olor de las pizzas que ahí se venden, entras y es como un ataque a los sentidos que no perturba, muchos colores contrastan con el blanco de las paredes y los solitaria que está la zona del mostrador de pizzas a diferencia del comedor. Puedes ir a comprar una cosa y terminar consumiendo otra, sentarte a comer pizza alrededor de tantas imágenes puede ser una experiencia muy agradable.
Una peculiaridad son las pizzas de «la casa», la dueña del negocio me contó que originalmente preparaba una pizza de espinaca pero un día decidió cambiar por un ingrediente local y así fue como se origino la pizza de chaya, además tiene una extravagancia que muy pocos se esperarían, la pizza de cochinita pibil, estás dos especialidades son algo que no te puedes perder.
También cuenta con sabores clásicos por si no estás para experimentos.

Conocí este lugar un día de mucha hambre, poco dinero y mucho sol, queda a 3 cuadras de mi trabajo y la pizza siempre es un gran aliado a la hora de no saber que comer y de no tener mucho dinero.
El lugar es como una especie de museo en honor a Frida Kahlo, y al mismo como una tienda de antigüedades y artesanías, en la que además de comprarte alguna de ellas también puedes pedir una rebana de pizza y una jamaica.
La pizzas son raras, no son exactamente deliciosas, pero tampoco son malas, digamos que son artísticas o artesanales y puedes elegir entre pizza de 4 quesos, de espinacas con queso, de peperoni, hawaiana o de champiñones, te la calientan el horno un poco y te la sirven, y entre las bebidas puedes pedir naranja, jamaica o coca cola, nada es natural.
Tienen mesas para comer ahí, o puedes pedir para llevar, no hay servicio de mesero tu ordenas, pagas y te sientas a comer, a lo que vas. Es un buen lugar para salir del apuro a la hora de la comida o del antojo.

Fratello’s me pareció de las pizzerías más originales, no sólo venden este platillo italiano, sino que también tiene su espacio cultural.
Tienen la parte de la galería que le da ese toque hecho a mano a toda la pizzería. Me encantó que hay muchos cuadros por todos lados, la decoración está padrísima, muy kitsch con buen gusto, obvio con motivos de Frida Kahlo por todos lados, muy hipsteriana la deco. Usan cajas de madera del mercado para las frutas como estanteros y se ven ¡bien padre!
Ya de entrada, el lugar te recibe de la mejor manera y luego el precio te termina de convencer, $ 15 pesitos por rebanada o $ 20 las pizzas de especialidades (TE LAS RECOMIENDO), con dos quedas bastante bien, pero si andas muy chonchi, pues ya con tres segurito sales a reventar. La pizza está muy rica, tostadita y crujientita, aparte tienen sabores muy exoticones, es la masa hecha con todas las de la ley italiana, pero con la opción de ingredientes muy mexicanos, lo cual la convierte en única en su tipo, si creías que la de carne al pastor era exótica, deja que pruebes la de cochinita pibil, es ¡ÚNICA!

La pizza es el mejor amigo del ser humano. Un compañero de batalla después de una fiesta o para esos días donde la flojera se apodera de cada uno de nuestros músculos pero a la hora de decir la palabra pizza todo cambia para mejor.
La ciudad de Mérida ofrece un sinfín de opciones para probar este rico platillo de los dioses del olimpo.
Fratello’s pizza es un lugar importante para recordar ya que, sus pizzas son muy ricas, ideales para calmar esos antojos del infierno. Para los vegetarianos les recomiendo la pizza de cuatro quesos que nos hace temblar de su exquisito sabor. Si quieres algo con más sabor la pizza mexicana esta dentro del plantel o la tradicional hawaiana y el mejor de los experimentos de este platillo, la pizza de chaya y tomate, como no enamorarte de Fratello’s pizza.
Fratello’s es un lugar que hay que ir si eres de los que le gusta la pizza.

¿Cuál es la preocupación de todos los yucatecos… ¡Exacto! Que no exista una pizza de cochinita. Los amantes de la pizza y de la cochinita me pueden entender, pero ¿qué creen? Sí existe un lugar en donde las hacen, se llama «Fratello’s».
Permítanme que me calme por un momento, a decir verdad no puedo controlar mi emoción, tanto que me impide escribir, es que no sé por dónde empezar…
Hoy tuve uno de los más grandes descubrimientos desde el año pasado. Para muchos la pizza puede no ser sobresaliente, para mí sí lo es ¿Cómo les explico? ¡Ya sé!
Imaginen esto: el pan es de lo más delgado sin llegar a ser inexistente, además es suavecito, ¡suavecito!; a éste se le pone una capa de salsa de tomate, la cual tiene que rebozar por los bordes, para que pueda dorarse en el horno y darle al pan una consistencia crujiente, no quemada, crujiente; luego, una capa de queso, mucho queso y finalmente la cochinita pibil con su cebollita roja curtidita y un poquito de chile habanero. No tienen idea qué delicia, picosita y exquisita. Es la combinación perfecta y la mejor idea que a alguien se le pudo ocurrir.
¿Les digo algo? A pesar de lo anterior, no es mi favorita, mi favorita es la de ¡tres quesos! Una joya gastronómica apta para cualquier tipo de estómago. Nomás imagínense todo el ese queso. Se me hace agua a la boca.
Ambas, junto con la de chaya (sí, leíste bien, chaya), pertenecen al menú de especialidades y cada rebanada tiene un costo de $ 20.00 pesitos. O si eres más tradicional, puedes optar por la de peperoni, la hawaiana o la de jamón, cada una a $ 15.00 por rebanada, nada mal ¿no? Pero si quieres una entera, las tradicionales están a $ 75.00 y la especialidad a $ 100.00 ¿quieres algo más?
Además de pizzería es una galería de arte, en donde predominan objetos que evocan a Frida Kahlo, creando un ambiente un poco surrealista, también hay obras con muchos detalles orgánicos y mexicanos, todo está a la venta, excepto las mesas y las sillas.
Añade a lo anterior la excelente atención de los encargados, dispuestos a explicar el proceso de cada una de las pizzas y dar recomendaciones, es cuando notas que aman lo que hacen y como diría mi madre: «por eso les va bien».
Por favor, visítalos y después me cuentas que te pareció.

No podía esperar para contarles de esta pizzería. Hay dos cosas por las que regresaría a un lugar: el sabor de su comida y el estilo que le imprimen a la decoración, y este lugar cumple con ello.
Frida Kahlo esta por todas las paredes del lugar, en cuadros, estampas, playeras, recuerdos, bolsos, en los cojines, entre otras cosas. Al parecer los dueños del lugar son fans de esta artista mexicana y han decorado este lugar de una manera que me encantó.
Bueno y no solo eso, lo importante aquí es la pizza y esa no se queda atrás es igual de buena que la decoración, cuesta ¡$ 15 pesos!, en esta ocasión probé la mexica, muy rica por cierto, la acompañé con un jugo de jamaica, la combinación resultó ser buena.
Otra de las cosas que me llamó la atención es el xoloitzcuintle que está en el lugar, es muy bonito y es original, no había visto uno. Por supuesto que regresaré y esta vez con amigos, me dijeron que en grupo la bandeja de pizza es más barata.