He estado tres veces y no vuelvo nunca más. Hemos pedido carne punto medio, la han traído, y por dentro estaba congelada todavía. Se lo hemos dicho al camarero y su única respuesta fue: «¿en qué punto lo pidió?». Como si lo hubiese pedido frío. El servicio es bastante deficiente en general, pedimos unas papas y tardaron años en traerlas, lo mismo con una bandeja metálica para calentar la carne,… En fin, sitio a evitar!