Mercado 24 de Agosto o Mercado de Anaxágoras

Este mercado de los 50’s sigue activo y lleno de comercios. Se presenta como una buena opción para conseguir productos básicos a buen precio, es, sin duda, una alternativa a los «super» de la zona.
La mayor parte de los locales están asignados a las antojerías, las mesas de cada local están llenas por ahí de las 2 de la tarde. Se puede sentir el olor de los tacos de guisado o de las gorditas de la antojería Michoacán, la mas famosa de todas. Junto a la zona de comida vemos los locales de carne y al fondo las frutas y veduras. Hay una sección pequeña, pero bien surtida, de velas y artículos esotéricos. Cruzando el mercado y ya cerca de la salida se encuentran unos cinco locales de arreglos florales que nada mas de verlos dan ganas de llevarlos a casa. El mercado cuenta con unos treinta espacios de estacionamiento y abre todos los días de 8 a 18h.

La ciudad de México es de las más grandes del mundo, en ella encontramos casi que de todo. En México los mercados son una figura comercial de gran importancia, de hecho se sabe que su origen real fueron los tianguis, que si bien todavía existen, muchos de ellos se convirtieron en mercados establecidos. Uno de los que me ha parecido muy bonito, ordenado y con gran variedad de negocios y productos es el Mercado 24 de Agosto, conocido popularmente como Mercado de Anaxágoras. Con aproximadamente 56 años de existencia, se ha convertido en uno de los más socorridos tanto por los vecinos de la Narvarte como por aquellos de colonias cercanas. Este mercadito es socorrido para algunos por sus tiendas de abarrotes, las fruterías, carnicerías y embutidos, mientras que para otros la oferta gastronómica es el principal valor pues cuenta con locales de quesadillas, gorditas y tlacoyos además de tacos, comida corrida, barbacoa y los mariscos. Otra característica interesante son los pequeños locales que están sobre la calle Pitágoras y que también pertenecen al mercado pues ahí se encuentran negocios de productos para limpieza, desde jabones hasta herramientas para la limpieza, como escobas, cubetas, jergas, entre otros productos; además se encuentran cerrajerías, peluquerías, jugueterías e internet público. Una de las recomendaciones son los tamalitos de elote que vende la señora que está afuerita del mercado sobre Anaxágoras, también vende pan de elote y pay de queso casero.