Un lugar encantador, diferente, divertido, económico y en verdad entretenido. Ofrece además el servicio de mesas de billar. Mientras esperas por una línea para jugar tiene cómodas y amplias salas, una zona de mesas donde puedes disfrutar de comida y bebida muy variada y rica: alitas, pizza, hamburguesas o mini hamburguesas emtre otros platillos y un bar bien surtido. Cabe mencionar que la espera nunca es por mucho tiempo. Y el servicio y trato son excelentes! Recomiemdo ampliamente visitar Royal Bol
Angel B.
Évaluation du lieu : 5 México, D.F., Mexico
Pasé para conocerlo y termine echándome una hamburguesa a la hora de la comida y una chela. No hay que jugar para comer o ir a tomar algo. El lugar esta súper limpio, una opción si no quieres comer en el Food court de la plaza. Esta bueno para ir con los amigos y jugar domino como precopeo.
Roberto F.
Évaluation du lieu : 3 Mexico City, México
En sus intentos por salir del concepto de clásico boliche, el Royal Bol inicia funciones hace unos meses ofreciendo algunos servicios que lo hacen destacarse de su competencia. De entrada a partir de los jueves y hasta el sábado, te la puedes aventar larga haciendo unas cuantas chuzas hasta las tres de la madrugada acompañado de unos buenos tragos mientras todos juegan y se disputan las mejores tiradas o bien, bailando con singular desparpajo. También es una buena opción para reunirse a ver algún partido de fut, que si bien este tipo de encuentros ya es una verbena, en conjunto con el boliche aquello se convierte en un completo aquelarre. Cuenta con tan sólo 18 pistas, 4 de ellas pertenecen al área VIP, lo cual implica que no es muy grande y por tal, les recomiendo que hagan una reservación. Otro dato que se me pasaba mencionar. Es que el área VIP cuenta con su barra propia, además de una mesa de billar para hacer más dinámico el asunto. La hora puede costar al rededor de unos 500 pesos, todo depende de cuanta enjundia le metas. Ya cuando hayas calentado tu tiro, puedes preguntar por las ligas y torneos internos que se realizan, no tengo entendido cuales sean los premios pero el orgullo de ser el número uno siempre será inigualable.