Tradicional zapatero que ha logrado el grado de Master para la atención del calzado por lo que logra dar nueva vida a los zapatos. Situación: botas de bovino, marca Aries, con una piel tan suave que aunque no me las quite siento perfectamente cada uno de mis dedos cuando paso mi mano encima de ellas. Tienen una clase divina y de tanto sentirme descalza las usaba para toda ocasión y como tengo un defecto patomecánico rompí el extremo derecho de la bota izquierda. Y este recomendable profesional salvó mi calzado con una sutileza y cuidado que casi ni se ven parchadas: Conservé mis botas, reutilizo y reduzco mi huella ecológica.