SushiClub Mérida

Lo mejor de este lugar son los precios respecto a las instalaciones, ya que es un restaurante super fancy en el que no gastas mas de 300 pesos. El servicio inmejorable.
A mi en lo particular me gusta mucho el sabor, de todo, pero si eres de los que no les gusta el marsco olvidate de este lugar, ya que el menú no está tan mexicanizado como en la mayoria de los restaurantes japoneses.
Al finalizar la comida es un must pedir el brownie.

Plaza Mangus sorprende con los establecimientos que alberga, uno muy interesante es éste, por qué? Pues porque es un lugar agradable y con buena comida.
El lugar está muy bonito, es moderno, decorado con buen gusto, la luz es tenue, lo que resulta en una atmósfera muy agradable e íntima, la música tiene el volumen correcto, lo cual aprecio mucho, pues odio que lugares que no son discos o antros tengan música ruidosa.
Ese día probé la pepinada, es una bebida que como el nombre lo sugiere es a base de pepino, resultó muy fresca y muy rica.
De entrada tuna tartar el cual estaba muy bueno, estaba crudo, tómalo en cuenta si solo comes comida cocida; probé unos edamames que «no mames» (perdón por al expresión) que ricos fueron, pero la noche se la llevó el salteado de mero y camarón, recomendadísimo.
El sushi que conocemos en Mérida dista mucho de la receta japonesa, pues está adaptado a nuestro paladar, lo cual es bueno, pues nos habla de fusión culinaria y cultural, sin embargo en Sushi club encontramos delicias bastante orientales diría yo, comí varios rollos, estaban muy buenos, me gustan sobre todo los que son de salmón, sin embargo mi momento favorito fueron los postres, el brownie con helado y baileys estaba delicioso, eso no es muy japonés, sin embargo es una bendición que sea incluido en el menú, teníà la textura estilo fudge que me encanta y su sabor era buenísimo.
El precio no se adapta a todos los bolsillos, pero es el esperado para la ubicación del establecimiento.
Recomendación de lugar, bueno para esa reunión con los amigos y también para llevar a aquella cita, visítalo y disfrútalo.

El lugar: al entrar te sientes en un lugar cálido, que te recibe con los brazos abiertos, elegante, íntimo. De techos altos, iluminación tenue e impecable decorado de interiores, uno de los restaurantes más estéticos de la ciudad. Con música predominantemente Deep House o Lounge, a un volumen perfecto para poder platicar por largo tiempo y muy a gusto.
La comida: diferente, de texturas y sabores que no he probado en otros sushis de la ciudad, cuyos rollos no son arroz con un poco de algo más. Puedo afirmar que más que un sushi más, es un restaurante japonés especializado en sushi. Increíble variedad de sushis y otras especialidades japonesas muy interesantes. Eso sí, gran parte de la comida es cocida, OJO para aquellos que prefieren la comida cruda. Los postres son excelentes y no muy dulces (uno de los mejores brownies con helado).
El servicio: excelente!

Yo no soy la mejor persona para calificar este lugar, pues mis mañas alimenticias (en específico a los mariscos) no crean un criterio incluyente a los alimentos de este lugar, sin embargo ahí les va la opinión de una no muy fanatica de la comida crudi asiática.
El lugar padrisimo, impecable, ambiente súper cómodo y meseros muy amables; la comida a tiempo en tu mesa y decoración muy original. Los precios justos para la zona, quizá no para ir todos los días pero si lo suficiente para visitarlo una vez a la semana.
El menú es súper amplio y variado, para mi tristeza no existen muchas opciones de pollo (como la comida de este tipo debiera de ser) pero siempre existen sopas u opciones vegetarianas que no decepcionan.
Los postres sin duda se llevan un 20 de calificación; sabrosisimo brownie con baileys y mouse de maracuya.
Pregunta por el lunch de lunes a jueves, te llevarás una súper sorpresa.

De ahora en adelante mi lugar favorito para comer sushi. A penas fui ayer y quiero volver mañana, pasado, ¡todos los días!
El lugar es bonito y está muy cómodo para cualquier tipo de reunión o comida, los meseros son muy lindos y están súper abiertos a ayudarte con tu elección.
Pero el sushi ¡dios míos! Creo que hacía mucho que no sentía tanta felicidad elementicia, el sabor es tan auténtico, suave y original que no me queda más que pedirles a todos los sushi lovers que vayan ¡ahora!
Aun así, si lo tuyo no es el sushi, igual hay otros platillos que te pueden hacer feliz :) sólo no te esperes unas hamburguesas (con todo respeto a esas preciosuras jajaja)
Precios que van de acuerdo al concepto y la calidad del lugar, aún así no tienes que caer en banca rota para probar, de lunes a jueves hay un lunch que va de $ 119 a $ 140 pesos e incluye: entrada, bebida, 12 piezas de sushi y café o helado (elige helado de maracuyá)
¡Perfecto!

I don’t typically do write bad reviews but this was the worst sushi I’ve ever had. The tempura included deep fried celery and was thick like onion ring batter. The fist was warm. I may have given up on sushi in Mexico.

Este fin de semana fui con dos amigos a comer y unos de ellos sugirió este lugar nuevo en Mérida. Creo que fue excelente sugerencia porque la verdad el lugar me encantó y a los demás también.
El diseño de interiores me gustó mucho porque te transporta a un lugar más intimo incluso estando dentro de una plaza comercial. Es muy creativo y agradable. El ambiente me gusto mucho ya que puedes platicar horas porque el mobiliario es muy cómodo y el aire acondicionado esta ideal.
El servicio fue muy bueno desde el principio hasta el final.
La comida me encantó. Pedimos un paquete de 30 rollitos de sushi por 250 pesos por lo cual me pareció bastante bien y lo mejor es que no son los típicos sushis de puro arroz sino que los otros ingredientes son los que predominan.
De cortesía te regalan unas bolitas capeadas rellenas de pescado pero creo que si es necesario pedir a parte una entrada porque los rollos tardan un poco (en realidad no es lento si te pones a pensar que puedes pedir cada rollito de algo diferente). Pedimos una entrada de atún muy rica. Y lamentablemente no nos quedó espacio para el postre pero quedamos en regresar a probarlos.
Me pareció perfecto para ir con la familia, amigos o incluso una cenita romántica.