Zorba el Griego

Yo si fui de esos chicos que todos los fines de semana estaban invitados a unos XV años diferentes y a veces hasta de a dos por semana, ya tenía todo bien previsto para cada caso y me sabía de pe a pa cada detalle de los diferentes salones preferidos para este fin. Me es imposible decir con exactitud cuantas veces asistí a un evento en este salón, pero lo que si se, es que en una de esas ocasiones yo fui quien entrego el primer ramo a la quinceañera. Ahí iba Tavo, con su camisa azul pastel sin abotonar el cuello porque esa era la moda, desfilando con el ramo de 15 rosas pintadas de azul porque era el color del tema de la fiesta.
Es un salón que no es muy grande y más bien meten a todos de manera que no importa que estemos apretados mientras quepan unos diez mas, el sonidero musical simplemente no ayuda mucho y es que al ser una construcción de paredes gruesas el ruido rebota provocando un estruendo bastante incomodo.
La comida no es nada mala, sus preparaciones son ricas y con una excelente presentación, su servicio es bueno, aunque debo decir que hace poco tiempo en una cena de una amiga de la familia el mesero que nos atendió se vio bastante torpe todo el tiempo, pero bueno a uno a veces no le va también y mas en estos detalles que se dejan a la suerte.

Está ubicado bastante céntrico y cerca de algunos templos muy bonitos como Santo Domingo y la Basílica de Guadalupe, detalle importante si estás pensando en celebrar tus XV o la boda. Por lo mismo de la ubicación no cuenta con estacionamiento en las instalaciones, exactamente enfrente hay un estacionamiento público donde puedes dejar los coches hasta altas horas de la noche, no es parte de la empresa de Zorba, pero aprovechando que tienen el salón dan el servicio hasta que salga el último invitado, obvio te cobran por hora.
El salón es amplio (buenooo dependiendo del número de invitados) y como su nombre lo dice, la decoración es totalmente tema de Griegos con columnas y espejos muy del estilo, es salón cerrado. La atención de la recepcionista es muy muy buena, ella es muy amable y hasta cierto punto accesible, dependiendo de tu presupuesto y necesidades es lo que te ofrece de servicios, trabajan con proveedores de muy buena calidad y todo te lo ponen a tu disposición para que tu armes tu paquete de fiesta a tu gusto.
Cabe mencionar que son los mismos de la Hacienda los Dorantes, así que aquí te pueden dar informes de ambos lugares! ojo la entrada al salón está por la calle reforma y las oficinas están a la vuelta en una puerta pequeña. Una cosa que me faltó mencionar es que sus costos son caros, pero no está de más que te des una vuelta!

Van dos veces que visito este salón, las dos han sido por invitación a celebrar los quince años.
La primera ocasión fueron los quince años de la hermana de un amigo, la celebración estuvo bien, la cena fue ligera pero de buen sabor. Lo único que no me gusto fue que para dar espacio para el baile en la pista, juntaron mucho las mesas y todos estábamos como amontonados.
La Segunda fiesta que fui fueron los quince años de mi sobrina, esta vez la distribución de las mesas y sillas fue diferente, había una área para adultos y una para los chavitos, donde había sillones.
Por ser un edificio antiguo y que desde su construcción no fue diseñado para salón de fiestas, el sonido no es muy bueno, para ambas fiestas el audio estaba demasiado fuerte y rebotaba lo que hacia que se viciara el sonido.
En cuanto a precios pregunte a mi hermano cuanto le había salido la renta del salón, y solo me dijo que si era un poco cara.
Sinceramente después de las dos experiencias que he tenido aquí, no lo consideraría una opción para realizar alguna celebración. En mi opinión ya hay mejores salones en la ciudad.

Salón de fiestas con mal servicio!
Fui invitada a una fiesta de quince años en éste salón, para empezar fue complicado encontrar estacionamiento por que este salón no cuenta con estacionamiento propio, el salón es pequeño y la distribución de las mesas se hace al rededor de la pista de baile que es pequeña, la acústica no es buena ya que hay mucha vibración. La comida, que fue de 2 tiempos, estuvo pésima la crema picaba mucho y la guarnición y la carne, del segundo tiempo, estaba dura, cruda e «incomible» (todos dejaron la comida del segundo tiempo). Para los adolescentes (invitados de la quinceañera y niños) había una barra de banderillas de fruta con chocolate y algunos otros snacks!
La atención por parte de los meseros fue pésima, no tenían actitud para atender a los comensales; la barra y la mesa de snacks para los adolescentes y niños estuvo desatendida!
Las instalaciones estaban limpias y en buen estado.
Recomiendo a los dueños del lugar que se preocupen más por la actitud de servicio de sus meseros, eso le daría un plus al lugar!

Yo siempre hago referencia a mis recuerdos para recomendar o no un lugar, para Zorba el Griego no será distinto. Cuando mi hermana, tres años mayor que yo, era adolescente, varias de sus compañeras escogían este lugar para realizar su fiesta de XV años, hasta la fecha creo que es una de las opciones para esta clase de celebraciones, sin embargo su fama a menguado poco a poco.
Un día, estaba en busca de un lugar para realizar un evento, así que fui a cotizar a Zorba El Griego, el trato es muy amable, te muestran las instalaciones sin ningún compromiso, el salón es definitivamente no muy grande, pero tampoco es pequeño, si saben distribuir las mesas o el mobiliario del evento, seguro queda bien, todo está limpio y dispuesto para ser adornado según la ocasión. El área de los baños es amplia y siempre limpia, algo muy importante, además la cocina tiene una decoración tradicional que va muy acorde al lugar. Cabe destacar que ofrecen también servicio de banquetes y tienen el contacto de meseros, animadores, luz y sonido.
Aunque la renta no es barata, tampoco es de las más elevadas. Puedo atreverme a decir que un punto que juega en contra de este lugar es su ubicación, ya que aunque se encuentra a tan solo una cuadra de Santo Domingo, es muy complicado encontrar un lugar para estacionarse, más si la fiesta es un fin de semana por la noche, se vuelve una tarea cansa, aunque frente al lugar hay un estacionamiento, este es muy pequeño y cierra temprano, así que hay que dar varias vueltas hasta encontrar un sitio.

Este lugar ha tenido sus altas, sus bajas y sus medias; tal como las tres estrellas de Unilocal lo señalan, en este momento vive una de sus medias, es decir, Zorba El Griego fue uno de los salones de fiestas más importantes hará cosa de 20 años, después llegaron otros sitios que con ideas más actualizadas han ido ganando espacio entre el gusto de la gente y Zorba El Griego ha tenido que actualizarse, en este momento va en camino de nuevamente convertirse en uno de los sitios más buscados para hacer fiestas, sin embargo o lo logra o muere en el intento.
Quizá una de las razones por las que este salón de eventos fue perdiendo en fama, se debió a que es incluso pequeño, nunca he asistido a una fiesta realmente grande en este lugar, además, si bien luce bonito de noche, de día no es el mejor lugar para las celebraciones; los espacios parecen diseñados para lucir bajo la penumbra.
Su cocina, esa sí que es buena, nunca he asistido a una fiesta en este lugar y que la gente no se coma todo lo de su plato, a pesar de que debo aceptar que sus banquetes son tradicionales: primer tiempo una crema, segundo tiempo un spaguetti o fetuccini, tercer tiempo el plato fuerte que siempre será alguna carne con dos guarniciones, y para finalizar, un postre sencillo pero con excelente presentación.
De los sitios para rentar Zorba el Griego es de los que están justo a la mitad, no es barato (no, no, no), sin embargo tampoco es de los más caros, obviamente todo varía de acuerdo al número de invitados y al menú seleccionado.
En una ocasión, fui a una fiesta infantil (me pareció de lo más extraño), definitivamente NO es la opción, todos los niños se andaban resbalando en el lustroso piso y fue prácticamente caída tras caída, así que insisto, es un lugar para adultos y para celebraciones de noche, principalmente.

Ya tiene tiempo que hubo unos XV años a los que me invitaron en este lugar. Por fuera luce como cualquier otro lugar del centro de Oaxaca, pero en el interior es realmente muy bonito en especial el área de sus jardines. El evento fue realmente de lo mejor, la comida comenzó muy a tiempo, donde sirvieron un caldo nuevo que había creador el chef, tío de la festejada. También nos dieron de comer un mole con tepiches que estaba riquísimo.
En cuanto al salón le puedo decir que es bastante amplio e ideal para cualquier tipo de evento. Parece como un lugar mágico en el que todo se te puede hacer realidad. Las fotos salen realmente geniales por sus acabados y aunque no necesita decoración, si la adornan bien llega lucir realmente impresionante. Los servicios y precios para este lugar son muy cómodos para todos los bolsillos si toman en cuenta su ubicación y belleza.