Parque Zoológico de Querétaro Wameru

Kinda liked it kinda felt bad for the animals. I live near the San Diego Zoo/​Safari Park. There is a HUGE difference in the way animals are caged. In San Diego they try to recreate the animals natural habitat, have multiple animals living together, and give th r m SPACE.
Here that is not the case. Animals barely have room to move around. Some animals are caged in rooms as big as my bedroom. That is sad.
Some of the animals are content in their small spaces. This is because the barrier between the animals and humans is a wired fence. Hence you can stick your hand in and touch them, which can be dangerous. Animals like the monkey and goat loved this because this means they get fed people food. I had just bought a popsicle and made the mistake of getting took close to the cage. The monkey stole my popsicle. I was kinda bitter about it.
Being so close to these animals with a thin barrier was neat. I’ve never been so scared of lions before.
The eating area has chickens running around freely waiting to eat whatever food falls on the floor.
I also got to pet and take a pic with a white tiger for about $ 40 USD.

A diferencia del zoológico de Chapultepec no me tuve que imaginar a los animales. Es un lugar creado a partir de especies rescatadas de distintos lugares. El lugar es austero pero la cercanía con los animales es su mayor atractivo. Tener a un león albino a un tigre de Bengala a no más de dos metros me hizo apreciar lo imponente de su belleza y erizarme de su fuerza contenida detras de las barras.
Los animales, todos, salvo los de nuevo ingreso, se encuentran en muy buen estado. Algunas especies como pavorreales y faisanes caminan al aire libre en el terreno árido y abierto del Wameru.
Disfruté la experiencia de esa cercanía de que no había multitudes arremolinadas entorno a una jaula intentando «despertar» o alimentando a los animales. Me tocó ver cómo alimentaban a los lobos mexicanos. El señor entró como en su casa a la jaula y empezó a aventar trozos de carne, ellos escogieron su pedazo retirándose a sus respectivos rincones para devorarlos. Ver sus colmillos diario no me haría acostumbrarme a entrar como si nada a su jaula.
Vi a un cachorro de león jugar con su madre, a un mono tratando de atrapar una gallina que caminaba afuera. Fue muy cool estar a tan corta distancia, nunca salvo en el zoológico de Chiapas había experimentado eso. Observar sus movimientos, sus reacciones, apreciar las plumas de las aves o ver a los ojos a un leopardo sirve para apreciar la belleza en otra de sus formas. Muy recomendable este zoo.