El Sartén

Hace un tiempo que caminaba por el Boulevard Aguacaliente, la plaza en donde se encuentra este negocio me llamo mucho la atención, total que como no llevaba prisa, crucé la calle para ver los negocios, así fue como me encontré con este lugar, lo primero que me encanto fue la fachada, con mesas en su pequeña terraza.
Como no tenía mayor apuro ni compromiso, decidí pasar y comer algo, que después de tanto caminar bien me hacía falta.
Todo el concepto de este lugar es una mezcla de lo tradicional mexicano con toques modernos, así tanto en la decoración como en los platillos, pues así pidas unas típicas flautas, te las sirven de una manera elegante y súper cuidada, el plato limpiecito de los bordes y muy bien decorado.
Pedí el especial de la casa, los chilaquiles sartén, que vienen con frijoles, huevo, carne encebollada, aguacate, lechuga y crema, servido generosamente, apenas pude terminar con todo eso, y para acompañar, una refrescante agua de chia.
Todo me encanto, claro que regreso y lo recomiendo.

Recientemente por azares de la vida vine a conocer este lugar, tengo entendido que abrió en junio, en esto corto periodo hubo un cambio de administración y sin duda los comentarios de mejora son bueno, pero no basta con los comentarios, dice que ver para creer, y yo tan arraigada a esta ideología pues dije a ver que tal.
Y que llego a hacer mi consumo, aquí la comida es meramente mexicana pero con una innovación muy padre en la presentación.
Para mi, la prueba de fuego de todo restaurante que presume de hacer comida mexicana, son los chilaquiles, si pasan la prueba de los chilaquiles entonces me tienen ganada.
Así que aquí iniciamos con la prueba y que me pido unos chilaquiles rojos acompañados de chilorio y ¡oh sorpresa!, que llega un plato con unos chilaquiles servidos de una forma nada convencional, siempre te los sirven así como desparramados y aquí me llegó una torrecita muy limpia y bonita, redonda muy acomodadita en el plato, con una recipiente en donde venían unos frijoles refritos, un totopo y por el otro lado unas papas guisadas con morrones y sazonadas deliciosamente, encima de los chilaquiles una tira de chilorio deliciosa.
Para los que no comen picoso pues te preguntan que a que nivel de picante los quieres o si quieres acompañar con una salsa aparte.
El servicio es muy bueno y atento, tienen música y Tv, los precios son muy accesibles, así que si no tienes idea de que comer en tu horario de comida de oficina pues ahí llega, es bueno, bonito y barato.