Muro Fronterizo

Review 56
Welcome to the Northwest corner of Mexico, or Southwest corner of the USA. The Muro Fronterizo has different meaning depending on what side of the wall you’re on.
In the States is seen as a border to keep illegals out of the USA. In Mexico it’s a shrine to 100s who have died attempting to cross the border through the ocean. The wall that keeps them from giving their kids a future, protection and safety… the thing that many of us US citizens take for granted.
It’s a bit disturbing seeing this landmark but important since it’s history, from both my cultures that to me resembles the Berlin Wall. I suggest you visit and see the start/​end of the 2,000 mile border dividing the USA and Mexico.
Plan B

*Tijuana* … ein Grenzübergang, eine Grenze, ein Grenzzaun und eine Stadt …
… wenn man die Bilder dazu betrachtet, dann kommen Gedanken, die sehr deutlich entlang der Grenzzäune dokomentiert werden.
3144 Kilometer lang ist die Grenze zwischen den USA und Mexico, zwischen Arm und Reich, Hoffnung und grausamer Realität.
*Tijuana* ist eine Stadt mit unglaublich vielen Facetten. Der Grenzübergang «San Ysidro» wurde 1996 in *Quentin Tarantinos* Film «From Dusk Till Dawn» auf seine Art und Weise sehr bekannt. Die Realität im täglichen Leben sieht auch heute nicht viel anders aus.
In Mexico Arbeitslosigkeit, Armut, daher ist es höchstes Ziel für einige Leute in den USA Arbeit zu suchen. Aber nicht nur Mexicaner möchten in die USA zwecks Arbeitssuche einreisen, sondern auch viele Menschen anderer Südamerikanischer Länder die sich ein besseres Leben erhoffen.
So schlägt man sich auf der einen sowie auf der anderen Seite mit dem Problem der illegalen Einwanderen herum. Eine Einreise in die USA wird verwehrt, wenn kein Arbeitsvertrag und keine Unterkunft nachgewiesen werden kann.
Also blüht das unberechenbare Geschäft der Schlepper, die die Menschen — meistens Nachts — über die Grenze bringen. An den hohen Zäunen sind zur Erinnerung an die zu Tode gekommenen illegalen Einwanderer unzählige Kreuze angebracht, versehen mit ihren Namen.
Aber nicht nur die nicht erwünschten Einwanderer machen Sorgen, sondern auch die unglaublich hohe Kriminalität, Drogen, Gewaltverbrechen, Prostitution und Diebstähle — oft sind Touristen die Opfer.
Nachts würde ich keinem eine «Stippvisite» in Tijuana empfehlen, denn dann kommt es nicht nur einmal in der Nacht vor das ein Tourist alles einbüsst bis auf seine Unterhose — wenn er Glück hat !
Am Tag ist das schon anders, denn die USA-​Besucher schätzen einen Trip in die Grenzstadt. Der Grenzübergang aus den USA zu Fuss nach Mexico und umgekehrt, vollzieht sich meistens sehr schnell. Mit dem Auto ist das schon mit längeren Wartezeiten verbunden. Zurück in die USA wird sehr streng kontrolliert !
Im gesamten Grenzbereich gibt es sehr viele Geschäfte, hier lebt man ausschliesslich um Touristen etwas zu verkaufen. Dazu Restaurants, Bistros, Kneipen, Bars, Kinos, Lebensmittelläden und jede Menge Souvenirläden.
Tijuana selbst bietet schon einige schöné Sehenswürdigkeiten, die sich lohnen anzusehen. Auch der nahe Strand und das Meer ist empfehlenswert. Allerdings erstreckt sich der Grenzzaun bis in das Meer und die Strömung ist dort unberechenbar, schwimmen unmöglich !
Fazit: Wie soll man nun so eine Grenze bewerten? Ich habe mich für vier **** entschieden, denn die Bewohner von Tijuana lieben ihre Stadt und halten sich von den negativen Seiten möglichst fern. Die dort lebenden Unilocaler zeigen ganz andere Möglichkeiten auf, die Berichte sind sehr interessant !

Que interesante que de un lado hay miles de personas hablando un idioma, compartiendo una cultura, batallando con un sistema de gobierno incompetente y del otro lado del muro fronterizo se encuentra otra sociedad y cultura totalmente diferente al ya estresado y cansado país de México.
Algunos dicen que somos el patio trasero de Estados Unidos pero yo pienso que ningún otro país tiene tan bellos paisajes, buena comida, hermosas mujeres y esos ambientes tan llenos de esa picardía mexicana, diría Thalía ese amor a la mexicana no lo encuentras donde sea. Los brazos de México son cálidos independientemente de su situación política por las importantes 43 razones en las cuales no pueden darnos una explicación.
Este muro es icono en la ciudad de Tijuana pues por este sitio han pasado infinidad de hijos, padres, hermanos que van con el sueño de ayudar a su familia, llenos de ilusión por conseguir ese tan aclamado sueño americano. Tijuana hoy en día es una de las fronteras más famosas del mundo y este muro es la división entre dos naciones donde pasan cosas muy diferentes y solo es una barrera lo que la diferencia.
Aunque nuestro gobierno no sea el mejor, nuestro país no deja de tener cierta potencia, detrás de ese muro la gente observa un monstruo dormido, cuando despierte serán los demás quienes quieran cruzarlo.

Este muro fue construido en 1994 para luchar contra la inmigración ilegal. Actualmente tiene una longitud de varios kilómetros que recorren la frontera con Estados Unidos. Creo que al menos son tres muros de contención que terminan en esta playa. El más visible es el que esta de este lado de México, un muro de metal oxidado, viejo y desgastado con miles y miles de cruces adheridas al muro que nos recuerdan los migrantes fallecidos que alguna vez intentaron cruzar.
Es triste ver que aún existen este tipo de divisiones en el mundo, dividiendo y reclamando una tierra que ni siquiera es nuestra.
Si es tu primera vez en Tijuana o tal vez eres un de los pocos locales que nunca ha ido, creo que sería bueno que te dieras una vuelta, vale la pena conocer lugares como este.
Y por otra parte más feliz creo que muchas personas que no pueden cruzar a Estados Unidos podrán decir que vieron los edificios de San Diego a lo lejos o que pudieron tocar el mar que une a Estados Unidos con México.

En una esquina de México, el muro de la vergüenza, el inicio del Muro Fronterizo que divide a México de Estados Unidos.
Hace un par de años que viajé a la ciudad de Oaxaca y conocí a dos muchachas, una española y otra de nacionalidad vasca, ambas me preguntaban algo que no pude contestar: Acaso no te ofende ver ese muro ahí?
Hasta ese momento no pude dimensionar la gravedad y el daño social que implicaba el tener un muro que me impidiera pasar a una tierra en donde el viento y los pájaros lo hacen libremente.
Me di cuenta, hasta entonces, que esta construcción, que inició en 1994 de metal y cemento, han dado no solo una triste identidad a la ciudad sino una idiosincracia diferente que la separan del resto del país.
Éste muro nos ha distraído del resto del país, creyendo que es aquí donde comienza el sueño americano. Creo que aquí, en esta ciudad y con este muro, es donde debe comenzar el sueño mexicano.
En este muro y sobre él, han pasado las historias más tristes en lo últimos 20 años. El Parque México esta situado justo al lado del muro y pertenece al lado gringo.
Es un lugar en donde cientos de familias chicanas y mexicoamericanas se reúnen con los familiares que se quedaron aislados de este lado del país, del lado de Tijuana, por lo que todos los domingos verás a familias abrazándose y besándose con un muro de por medio.
Que si me ofende? Este muro me indigna, no solo ha traído grandes comunidades de migrantes que han quedado varados en esta ciudad sumergidos en drogadicción y pobreza, sino que también ha creado grandes problemas económicos en la región.
Este muro me ofende, y hoy 9 de noviembre, así como hace 25 años en Berlín, yo también espero que algún día caiga este muro en la esquina de éste México.
El muro ha sido lugar de diferentes intervenciones artísticas, vale la pena visitarlo, tamarte la foto y contemplarlo.

De esas veces que la verdad tienes sentimientos encontrados para describir un lugar como este, que para muchos es una ventana a un sueño de progreso, para otros la ventana a la nostalgia, a la tristeza, a la separación, de esas que aplica el decir «tan cerca y tan lejos» y la verdad es que sí, ves a través de una malla o una pared de lámina o unos tubos oxidados como detrás de eso hay un cambio radical de vida, de pensamiento.
Tijuana, tiene esto, ese muro que divide ideologías, razas, sueños, familias, en donde parece fácil dar un salto hacia el «otro lado» pero que en realidad no es así.
En el área de Playas puedes ver un acceso que pareciera nada seguro porque la división del muro entra hasta el mar, muchas veces se bromea diciendo ahí nadando nos pasamos rapidito y ni quien se de cuenta, pero nada que ver, la verdad es que es toda una hazaña y peligro hacer eso.
Si vienes de visita a Tijuana, no dejes de pasearte por el muro, no solo para decir que estuviste aquí, realmente es un momento de concientización y de cierto modo de valorar que no tenemos que pasar por algo así, que para muchos ha sido una pesadilla al intentar cruzar este muro para explorar nuevos horizontes.

Nuestra frontera es tan amada, como criticada o despreciada. A pesar de que le abre los brazos a mucha gente. Por algo se refieren a ella como ¡la más visitada del mundo!
Es amada porque hay personas que llegaron sin un peso en la bolsa. Y en la época de los 50’s más o menos, empezaron a llegar gente de fuera a poblar y a buscar una oportunidad mejor que las que le ofrecía su lugar natal. Muchos tuvieron la suerte de que les fuera ¡excelente!
Es criticada como la de mayor prostitución, vicio, tráfico de drogas y también el innegable problema de la inmigración. Pero ha estado ganando mucho terreno mi Tijuana en busca de mejorar toda la mala imagen que venía teniendo, y no solo de palabra, sino de acciones, como lo son: eventos culturales, Tijuana Innovadora y movimientos a favor de comunidades menos favorecidas.
Es despreciada, porque mucha gente ha perdido desgraciadamente en nuestra frontera o muro fronterizo a su esposo, hijo, hermano o mínimo a un conocido por buscar el falso «sueño americano». ¡Que ha cobrado muchas vidas!

Algo que definitivamente es único en la ciudad es el muro fronterizo y esto aunque representa cada vez más un símbolo de tristeza en indignación es sin duda algo que atrae a curiosos de todo el mundo. Somos una ciudad que es la frontera más visitada y la entrada con más flujo hacia Estados Unidos, aunque esto es una realidad muchos de los que aquí vivimos no la asimilamos como algo consiente, sin embargo esa realidad es obvia al voltear a ver este muro que nos separa.
Esta malla que pareciera frágil y fácil de atravesar no lo es pues siempre está custodiada por agentes de migración al largo de esta división; una manera de apropiarnos de esta situación y de mostrar nuestra inconformidad es a través de eventos culturales en donde el muro es testigo o bien poniendo representación gráfica de lo que su existencia representa, ya que al salir del aeropuerto de Tijuana lo primero con lo que te toparas es con esa línea divisoria pero con cruces blancas que representan a todos los migrantes muertos en el intento de cruce. Si nunca te has dado la visita por la orilla de este muro, siempre es una buena oportunidad para reflexionar sobre el mismo.

¿Sabías tú que Tijuana cuenta con la garita con más tráfico de personas en el mundo? Por esta puerta ingresan más personas que en ninguna otra puerta internacional del mundo.
Tijuana es considerada una ciudad de paso, por lo que no es muy común que la ciudad tenga algo típico, es por eso que se considera que es una ciudad multicultural ya que contamos con mucha visita de extranjeros o personas del interior del país.
En esta frontera están clavadas muchas cruces que simbolizan las personas que han causado baja al intentar cruzar ilegalmente la frontera para cumplir el sueño americano.
Por otra parte se ve sencillo cruzar con tan solo brincarse la pequeña barda, pero la verdad es que tienen un control extraordinario contra los imigrantes, cuentan con aviones de control remotos, aviones no tripulados, caballería, cámaras, sensores de calor, patrullas entre otras cosas que hacen que las personas se arriesguen para cruzar por el desierto entre Tecate y la rumorosa.

No se le llama a Tijuana el lugar donde comienza la patria, solo porque se escucha cool.
Tenemos la suerte, o para algunos desdicha, de ser los vecinos del país más poderoso del mundo, Estados Unidos. Y por lo tanto a todo lo largo del norte de la ciudad se encuentra este muro, completamente diferente en diversas zonas, en la playa solo son algunos barrotes en donde se celebra una misa binacional, en la zona cercana al aeropuerto se ven cientos de cruces de madera en honor a los que han muerto buscando ilegalmente el sueño americano.
Si tienes la oportunidad de ver en vivo la división México– Estados Unidos desde el aire te sorprenderás, notaras la diferencia cultural que existe entre vecinos, de un lado una ciudad limpia y calculada y del otro la espontaneidad y poca organizada estructura de Tijuana.
Perfecto para los fotógrafos que buscan encontrar historias en imágenes que marcan emociones en las personas.

¿Qué es lo que hay del otro lado? ¿Qué es lo que se observa más allá del muro?, ¿qué es lo que buscan esos que se lo brincan? Ah ya sé, es el sueño americano, ¿sueño? Es que acá no hay trabajo, no hay nada, la violencia acabó con mi pueblo me dice un migrante que espera la mejor oportunidad para cruzarse de ilegal pal otro lado, allá asegura podrá hacer un chingo de dólares y sacará a su familia de la miseria en que vive.
¿Y la migra no te da miedo?
Me da más miedo el hambre.
¿Y cómo harás para cruzar?
Espero el cambio de turno, parece que hoy hará frio y mucha neblina, el frio disminuye la efectividad de los sensores de calor, la neblina me oculta de las cámaras, el cambio de turno distrae a los guardias y con suerte mañana me estaré comiendo una hamburguesa después de brincarme ese pinche muro.

Este muro representa el límite del territorio Mexicano… Pero para muchos es algo mas que eso, representa esperanza, sueños, añoranza…
Cuando los días están despejados me gusta cómo se divisa a lo lejos la Bahía de San Diego, También me gusta venir a contemplar el mar, y siempre me ha llamado la atención como a pesar de este muro que nos separa de nuestro país vecino podemos compartir un grandioso mar y maravillosos atardeceres…
Como toda buena fotógrafa me gusta observar la reacción de la gente. Y aquí uno puede observar la mirada de esperanza de mucha gente, al pensar en el gran sueño americano, de que algún día podrán cruzar y tener una mejor vida, o la añoranza de volverse a reunir con sus seres queridos.
Este es el punto de reunión de muchas familias que están divididas por este gran muro, y estos momentos en que pueden verse y convivir a través del muro son muy emotivos.
A lo lejos siempre se podrá ver a la migra vigilando que todo esté en orden y que nadie se vaya a cruzar ilegalmente.

Justo hace dos días que caminaba por el malecón de Playas de Tijuana, reflexionaba e incluso me preguntaba en voz alta, ¿qué hace diferente el mar de México que el de Estados Unidos? Nada, absolutamente nada, (me dije) es igual, pero está dividido… está separado en el mar por esa línea imaginaria que un poco antes de llegar a la playa y tierra firme, divide ambos países, mediante este muro fronterizo de acero oxidado en esta zona. Es el símbolo e ícono legal que diferencia que de este lado del mapa somos de tercer mundo, allá de primero.
Nunca me había tocado presenciar (lejos de las noticias), a un grupito de personas que se acercaba en bola y se dispersaba a lo largo del muro para poder platicar con sus familiares que ya les esperaban de este lado de la frontera. De aquel lado, del gabacho, se trata de un parque estatal de los más olvidados (según cuentan ellos) acá, del parque de la amistad, donde se entretejan tantas y tantas historias de lucha, separación y supervivencia.
La escena que me tocó ver, era verdaderamente conmovedora. Me recuerda aquel muro de las Alemanias, aquel que fue derribado en 1989. Este muro, el fronterizo del que les habló cada vez se ha sofisticado más, en algunos puntos de la frontera, haciéndola impenetrable, lo q les obliga a nuestros hermanos, a buscar sitios de mayor peligro para cruzar.
En este muro de altos barrotes de acero, en la zona de playas hoy por hoy se observan mantas, con fotografías en blanco y negro de migrantes trabajando en los campos agrícolas de Estados Unidos. Es un clamor por ellos y su esfuerzo.
En otra extensión de este muro, en otra área de la ciudad, se observan cruces que representan a nuestros muertos, fallecidos por querer alcanzar el sueño americano.
Este muro es el recordatorio diario para quienes vivimos en Tijuana, de lo que es la rivalidad, las divisiones, la muerte, la lucha, la separación de familias, las diferencias entre países, y seres humanos, que nos hacen desear un cambio, una política migratoria integral, un mundo mejor.

La Esquina de Latinoamérica, ¿ Lo sabías? Aquí empieza la patria. México da la bienvenida a esta región del mundo, con una vista excepcional, se observa de forma gráfica cómo se divide Estados Unidos de México. En este muro han sucedido los encuentros más tristes y los más alegres, ¿ Por qué razón lo menciono? Porque en este lugar se dividen dos países desiguales. Sin embargo nos muestra que somos una región. De lado mexicano, está el Muro, el Faro de Playas, un jardín botánico con las especies de flora endémicas de la zona, y del otro lado, el Parque de la Amistad en San Ysidro, California. A través del muro, muchas familias se encuentran. Hace unos años las familias deportadas de Estados Unidos, podían convivir a través de una malla y tocarse las manos por lo menos, actualmente sólo se puede convivir a través del sonido y de la vista, cada fin de semana se reúnen familiares de Estados Unidos y de México para acercarse aunque sea de forma lejana y verse.
Muchas organizaciones civiles realizan actividades los fines de semana, éstas dedicadas a la defensa de los migrantes, música, actividades artísticas y culturales a través del Muro. No te puedes perder la oportunidad de tomarte una foto y decir que aquí estás donde empieza la patria: México.

Cuando era pequeña e iba a Playas de Tijuana me causaba conflicto ver una especie de vallado en la arena y un poco más allá en el mar, no comprendía por qué los adultos hacen esta clase de cosas, separar, dividir y aislarse del resto de las personas. Incluso llegué a imaginar que del otro lado vivía un hombre muy gruñón que no quería ser molestado.
Con el paso del tiempo me acostumbré a verlo, a saber que estaba allí y que posiblemente el otro lado de la playa sería más divertido, pero también más peligroso. Tanto así que llegué a pensar que todas las playas del mundo tenían separación por estado y por ciudad, para mí Tijuana es el centro del mundo y, si es normal un muro, seguramente en otros lugares será lo mismo, pesaba.
Luego me di cuenta que era una división internacional y mi imagen de el hombre-​ogro desapareció, para posteriormente odiar al muro y la cicatriz que le causa a la tierra, a la playa y al mar.
Una vez, en compañía de unos amigos, a las once de la noche, aproximadamente, se nos ocurrió retar al muro y cruzarlo. Nos sorprendimos cuando a escasos metros de estar al otro lado y descubrir que efectivamente es más divertida (por ser prohibida), una luz de láser color verde nos señaló desde las alturas. Era una advertencia, un helicóptero monitoreaba el área porque a esas horas hay gente que verdaderamente quiere estás allá y vivir «el sueño americano.»
Pronto regresamos con el miedo de quedarnos más tiempo y nos dimos cuanta que no sólo a nosotros nos habían señalado las luces, sino que un grupo de migrantes fue frenado en sus intentos de cruzar. Encendimos una fogata y compartimos la luz y el calor del fuego con los tres hombres que fallaron en su cometido.
Sin duda es un lugar único en la Tijuana y para mí es un símbolo con una mezcla extraña entre recuerdos de una infancia imaginativa y un desprecio por la censura.

En el más sentido estricto de la palabra el Borderline es el símbolo que hace a la frontera, frontera. Sin embargo, «el borderline del faro», «la barra de playas» es la zona más simbólica de todo el muro fronterizo, pues como se guste ver es el principio y el fin de la república, es el lugar «donde empieza la patria». La esquinita de nuestra bella ciudad.
Ciertamente tiene un aire nostálgico pararse y ver al mar abierto, la única zona que de forma visible no está presente dicha barda, pero que sensores infrarojos alistan a los «migras» que cuerpos extraños entran a las aguas «gringas». Siempre veremos del otro lado miradas extranjeras que nos miran con extrañeza, nosotros somos sus otros y viceversa.
Es el lugar escogido por excelencia por iniciar y acabar protestas, para eventos culturales y movimientos sociales, para los políticos un paradero obligatorio y el sitio donde muchos sueños se quedan entre las rejas negras que dividen ambos países. No se cobra por ver, es una bella y bohemia vista a una realidad diferente a la de México.

Desde lejos la impresión de encontrarme con el horizonte del muro fue abrumadora. Al acercarme y ampliarse las dimensiones de esta barrera de metal que no cede en su recorrido y continúa hasta adentrarse en el mar fueron de una impresión visual y emocional muy fuerte.
Este es el último rincón donde existe aún Latinoamérica. Más allá, apenas a un paso es otra cultura, otras leyes otra historia que, aunque proveniente del mundo occidental, es ajena. Lo viví cuando visité por primera vez Estados Unidos, es otro mundo, un idioma diferente, un trato con la gente distinto, las similitudes llegan una vez que la impresión de las diferencias cede ante lo que nos hace humanos y las cosas que compartimos en común. Pero el primer encuentro es fuerte como golpear un muro de concreto con una bala de cañón.
En este caso el muro es de metal y el agua traspasa la barrera que se impuso a su constante ir y venir en la playa. Las olas siguen su curso y corroen todas las barreras. Así como por millones de años trituraron piedra para volverla arena terminarán destruyendo el metal y quizá algún día, se pueda correr en la playa sin otro impedimento que el cansancio físico y el sudor al correr al lado del Pacífico. La espera, la esperanza, los sueños, las diferencias… pensé en muchas cosas.
El amanecer nublado en este punto y la soledad, el silencio de este mi primer encuentro con una frontera física entre países fue una de mis mejores y más apreciadas experiencias en Tijuana.