Atención, esto es grave, he encontrado un sitio en La Sagrera /Plaça Maragall que no es un bar Manolo. No, no hablo de Santangelo’s, que también está muy bien y todo el mundo lo conoce, sino de otro que fácilmente podría hacerle la competencia por su encanto. Y si estás pensando«Oh, no, otro lugar de estos hipsters con sillas incómodas, precios caros y porciones minúsculas», cambia de chip. No diré que es barato, pero es un sitio espacioso, luminoso, donde va gente de bien(personas mayores) el servicio al cliente es agradable(excepto la mujer mayor, solo la he visto siendo simpática con gente de su edad), hacen horchata y zumos naturales(¡horchata!), cuidan los detalles(pides cruasanes y te los ponen unos segundos al microondas para que estén calentitos, esto no lo suelo ver en sitios franquiciados como Granier y etc)… ¡Oh, y las butacas! ¡Mirad qué butacas! ¡De hecho olvidad todo lo anterior y mirad las fotos de las butacas… Qué demonios, si yo solo voy por las butacas. Si me dicen de ir a un sitio con terraza no voy a ir allí, si veo que las butacas están llenas paso de largo, pero las butacas… ¡Uf! todas las cafeterías deberían poner butacas, ¿no te parece? –Ya, pero ocupan espacio… a más sillas, más clientes -¿Y qué más te da quitar espacio? Es verano, la gente busca terrazas, los interiores están vacíos… –Ya pero… -¡NO, Butacas! En fin, que si quieres ir a tomar una cerveza, una cola y unas bravas, pegar unos cuantos gritos con tus colegas, La Sagrera está lleno de Bares Manolo. Si buscas un lugar donde estar tranquilo, tener una conversación relajada con un grupo reducido de amigos, respetando el ambiente y tomando unas pastas y un café, yo te diría que le dieras una oportunidad. Vale, admitámoslo. No es el Santangelo’s, no llevan toda la vida ahí y ni tienen una larga experiencia haciendo cafés de todas las variedades ni horchatas con bolas de helado de sabores. Pero oye, dos cafés con leche y dos cruasanes por 4,90 € por el entorno y la comodidad, no está nada mal.