Flotarium

Hace años que tenía el Flotarium en la mira, pero nunca se presentó la oportunidad. Hasta que me quedé embarazada de gemelos y ahora, en el sexto mes ya tengo la gracia y elegancia de un hipopótamo fuera del agua. Quién más sufre son mis lumbares y mi columna y justamente para esto el Flotarium se suponía que va muy bien.
Así que decidí hacer la prueba.
El cacharro es como una bañera muy grande con unos 30 cm de agua salada dentro. Tan tan salada que te hace flotar. Después de ducharte, ponerte unos tapones de oido (para que no entre la sal) y sacarte joyas y demás tu misma puedes cerrar la tapa de la bañera (está dentro de una habitación privada) y apagar la luz si así lo deseas, con lo que te quedas completamente a oscuras. Los primeros 10 min te ponen música de relajación, hilo músical que te volverán a poner unos 2 min antes de que se te acabe el tiempo, que sino no te enteras.
Consejo pro: llévate tu cepillo de diente y pasta de diente para poder entrar en la bañera con la boca limpia, sino te va a molestar después de un rato. Como no hay otros estímulos te das cuentas de las cosas más raras.
Los primeros 10 – 20 minutos son… raros. Mi columna, y sobre todos mis lumbares hicieron sonido y todo al reajustarse flotando en el agua, sin puntos de presión. Curiosamente los gemelos también se quedaron quietitos flotando conmigo y solo empezaron a patear cuando pusieron la música al final (probablemente para protestar que ya se había acabado la función — sentimiento que comparto).
Así que abrir la tapa y a la ducha para sacar la sal de la piel y terminar con una ducha muy muy fría. Porque el agua tiene una temperatura muy parecida a tu temperatura corporal, pero parece que estás super caliente cuando sales de la bañera.
La ducha tiene champú, acondicionador y jabón de cuerpo. Además, en el lavabo del centro después encontrarás desodorante, palillos para limpiar las orejas y diferentes botes con geles y spray de pelo.
En resumen: ya me he comprado mi bono de 10 sesiones (que con tu primer Check-​In además tienes 10% de descuento) y organizado mi cita semanal. Que eso ni yo ni los gemelos en construcción nos lo queremos perder :)
PD: Y las chicas del centro son super simpáticas.

Flotar en una cápsula a modo de gran bañera futurista ya tiene un precio, 35 € por una sesión de 1 hora. Si la cosa te gusta puedes comprar un bono de tres sesiones por 90 euros.
Aquí lo que se hace es relajarte en el agua, como si estuvieras en medio del Mar Muerto, porque realmente las bañeras están llenas de agua y mucha mucha sal, realmente contiene 600 litros de agua y 300 kilos de sales.
La primera vez que fui, y solo iba a pedir información, me enseñaron las salas, las cápsulas — bañeras, me abrieron una para que pudiera verlas… en fin, me acabaron dejando el gusanillo dentro de qué sensación se tiene cuando se esta dentro de estas cápsulas, tanto que al final tuve que probarlo.
La experiencia de flotar durante 1 hora es altamente recomendable. Al principio jugué un poco a hundirme sin prestar mucha atención a la relajación, al final me quedé medio dormida, el olor, el aislamiento total, hace que con los tiempos que corren te relajes pasado los primeros 5 minutos.

¿Qué le puedes regalar a alguien que tiene de todo?
Esa es la frase que pude encontrarme en el escaparate de este lugar (el de la calle Valencia), y para mí no es del todo acertada. Aparte de que parece un anuncio para pijos sobrados de cosas materiales, coño! a mi me apetecería mucho probar esto y no tengo de todo.
El caso es que aquí te meten en unos huevos gigantes rollo Guerra de las Galaxias y dentro flotas en su agua mezclada con sal. Una nueva forma de relajación que superó todas mis espectativas. La chica que me atendió me enseñó las cápsulas y me comentó todo el proceso. Lo ideal es quedarte con la cápsula totalmente cerrada, aislado del ruido y de la luz, llegar a un estado de relajación máximo. Ella me confesó que a veces tenía que moverse porque de lo que se relajaba sentía que no tenía brazos. OSTIA! esto hay que probarlo!
35 euros la sesión o la opción de sacarse bonos de 3, 5 y 10, éste último a 260 euros, y puede ser compartido con distintas personas.
Así que ya sabes, no hace falta que tengas de todo, puedes pasarte por los huevos galácticos flotadores y disfrutar un rato. Yo creo que, aunque al principio pensé que podía ser algo elitista y demasiado pijo, esto debo probarlo. Si pagas 30 euros por un masaje, por qué no hacerlo por una hora de flotabilidad.
Además no hace falta que lleves nada, te lo proporcionan todo: bañador, secador, toalla…
Nota: Además de el de Plaça Narcís Oller, tienen otro en carrer Valencia 160.

Es un lujo. Una pijería.
El asunto es meterse en una capsula estilo huevo gigante donde la combinación de agua y sales es la ideal para flotar sea cual sea nuestro peso –como ocurre en el Mar Muerto. El agua a temperatura corporal. Ni un ruido y si te atreves ni un rayo de luz… así la experiencia es mas intensa.
Pero ya sabes. Sales limpito y no lleno de barro con una cara de relajado que se te quita al salir de la plaza donde esta este local. El a
La gente que te atiende es muy profesional y te explican hasta el cansancio como es el asunto. Si quieres te puedes apuntar una sola sesión (35 €) o un pack (3 sesiones de 90 €). Duchas, toallas y privacidad por descontado.
Lo único que lo supera es la ingravidez del espacio exterior, ese que esta reservado para la gente de la Nasa, pero en este caso sin el estrés de la cuenta atrás y sin problemas meteorológicos al aterrizar.
Buen viaje.
(Yo me pediría una cabina para dos… pero se ve que esta opuesto a la terapia… OH¡¡¡)