Restaurante familiar donde se come muy bien y a muy buen precio. A grandes rasgos es como todos los restaurantes chinos. Menús abundantes a muy buen precio y sales lleno. Lo que puedo decir de éste en concreto es que, como lo tenemos muy cerca de casa los dueños ya nos conocen, ya que vamos de vez en cuando, sobretodo cuando hemos estado haciendo gestiones por la mañana y ya no no da tiempo a preparar nada. Son gente muy agradable que siempre te saluda, tanto cuando vas a su restaurante como si te los cruzas por la calle. También les hemos visto hacer la compra en los supermercados de la zona, con lo que te da más confianza con respecto a la materia prima que utilizan, tan cuestionada en este tipo de comercios muchas veces. Resumiendo, buen ambiente, buena y abundante comida y muy buen precio.
Raül R.
Évaluation du lieu : 3 Barcelona
Parece que es un chino de los de toda la vida. ¿Qué quiero decir con esto? Que lleva ya muchos años dando de comer chino a la gente del barrio…, y más allá(y algún chino se ha visto comiendo aquí). Cuando se pusieron de moda los chinos, estaban de moda. Ahora, lo están menos, pero siempre sigue yendo gente. Yo voy menos(como están menos de moda, voy a otros lugares más de moda, para parecer cool), pero aún cae alguna vez algún día que caigo por aquí. El local es relativamente grande sin ser de esos espacios descomunales donde sólo comes tú y todo parece muy raro. El camarero acaba de salir de una película de Wong Kar-Wai; con un bigote de actor de películas lentas. El hombre es muy amable, siempre te invita a chupito y, cuando se fumaba, te invitaba a cigarro(tan amable que yo que no fumo le había cogido el cigarro para no hacerle un feo). Es muy-muy barato; así que si eso os hace sospechar no vayáis, miedicas. Hace los platos habituales, en cantidades correctas. No es la octava maravilla del mundo: no es la muralla china –por hacer una gracieta-, pero sí una pared que te aguanta la casa, bonita y barata, y digna, más digna que otros.