Salón Amistad

Esto es lo que se conoce como un típico chino de Barcelona. Aunque la comida no es para tirar cohetes (muy normal), cené muy a gusto y las raciones son abundantes para lo barato que es. Yo pedí arroz tres delicias y pollo frito con patatas fritas y la verdad es que no estaba mal.
He ido a chinos mejores pero si estás por la zona, no quieres gastar mucho y quieres cenar tranquilo (el comedor es amplio y cómodo), esta puede ser una buena opción. Al acabar tuvieron el detalle de regalarme un calendario del 2014, qué majos :)

Tras el ciclo de auge y declive del restaurante chino como restaurante popular de moda, muchos locales con un aforo para un regimiento entero aguantan hoy entre semana de menú en menú, en una clara desproporción entre su enorme capacidad y la escasa clientela. Sin embargo aguantan. Sería el caso del gran restaurante chino Salón Amistad, en la calle Conca, desolado como un escenario postnuclear y con esa extraña música tradicional en el ambiente, con estilo y arreglos de Kenny G.
Los menús son, como es propio de estos lugares, bastante más baratos que en cualquier otro restaurante, aunque aquí ofrecen una oferta triple que va desde los cinco euros hasta los siete y medio. Éste último incluye platos de pato, aunque no lo hemos probado.
Como es evidente no tiene sentido aquí una crítica gastronómica, pero se come tranquilo; en una tranquilidad inquietante pero muy tranquilo.