Napoli Prima e Dopo

Over the years this Italian restaurant appears to have switched owners but it maintains the same good quality in its food. Excellent pastas and pizzas, and an entire range of Italian cuisine at its best. We keep coming back!

Cené aquí hace algunos meses con un amigo y, en breve, me gustó mucho. El sitio era tranquilo, la pizza — en particular la masa — era buena (y grande!), el vino era bueno, la camarera era muy amable… Es un poco más caro que un restaurante normal/​barato (~10 € para una pizza) pero yo volvería porque vale la pena pagar más para comida tan rica y auténtica.
Y el 50% de los demás eran italianos!

Parece que un restaurante italiano tiene que ser como una casa rústica, con el horno de leña bien a la vista y con camareros atareados que no paran de corretear por entre mesas apretadas y con manteles a cuadros.
Y no. Los hay que tienen comida italiana pero que son más discretos y, a mi entender, más elegantes.
Es el caso de Napoli prima e dopo. Me gusta su decoración, con las paredes pintadas con bonitos trampantojos. Las mesas con blancos manteles y unas sillas que siempre miro y pienso que en mi casa estarían bien.
Tienen pizzas, claro está, como casi todos los restaurantes italianos. Pero también otras cosas, como entrantes que van más allá del tomate con mozzarella, ensaladas variadas, carpaccios deliciosos, pasta, rissottos, pescado y carne… donde destacaría los escalopines al limón que me gustan tanto como los mejores que he probado en la vida, pero que me pillan lejos para ir a menudo: en Roma…

Es un restaurante puramente italiano, con dueños italianos, lo notaremos, ya que apenas hablan español.
La carta de es extensa, veremos tanto pizzas, platos de pasta, ensaladas Pero lo mejor es la pizza, son enormes, con masa fina, pocos ingredientes, borde grueso y con sabor a pan. Están hechas en un gran horno de leña, expuesto a los clientes, con lo que podemos ver como las cocinan.
El local tiene una cálida decoración, invita a la tranquilidad, además que las mesas no están agolpadas las unas con las otras, lo que lo hace perfecto para una cena romántica.
Lo único malo que le veo, es que para ir al lavabo hay que pasar por la cocina.
En cuanto a la localización, está en un lugar céntrico, lo mejor es bajarse en Hospital clínico, línea 5, y después andar unos 5 minutos.

Impresionante restaurante italiano situado en Villarroel, al borde de la diagonal y cerca de Hospital Clínic y la Facultad de Industriales. Un lugar recomendadísimo sobre todo por sus pizzas, idénticas a como las hacen en Italia: de masa fina y pocos ingredientes, y un sabor exquisito.
Tienen un gran horno de leña donde cocinan las pizzas, y se nota en la calidad de la comida que te sirven. La variedad de platos y pizzas a elegir no es muy amplia, pero a cambio el precio es ajustado y tienen menú de mediodía.
La decoración es muy austera, con mesas y sillas muy sencillas aunque suficientemente cómodas. Y los dueños y camareros, italianos; lo cual es un punto más a su favor.
No puedo decir mucho más de este sitio, ya que creo que he sido bastante conciso: buen precio, buenas pizzas, y recomendadísimo si os gusta la comida italiana de verdad.