Palets

Cuando vas caminando y entras s un sitio porque tienes que comer y de repente te llevas una sorpresa. Este es uno de esos lugares, la atención es de primera y las bocatas están a muy bien precio, sabrosas y de buen tamaño. Pedi el vermut de la casa y estuvo muy sabroso (no he probado muchos tampocos) y las patatas bravas cumplieron su objetivo). Así que si quieres comer con mucha tranquilidad y a buen precio este es tu sitio.

No puedo decir mucho del sitio. Lo había visto varias veces pasando con la bici pero me paré el otro día por fin. Me llamaba la atención el tono pintoresco. Sillas azules, con palets en forma de estantes y en fin… lleno de esta decoración especial :)
Yo solamente me paré a hacer un café y me atendieron super bien y me pareció un sitio encantador en todos sus sentidos. Y también me comí un croissant aunque ya era la 13h (si, a veces desayuno un poco tarde, llego al límite del «Voy a morir de hambre» y se me junta casi con la comida… pero como igual). Lo estaban preparando todo para comer y tiene buena pinta y no me pareció caro. Todo es probarlo.
Pero el resumen es que volveré ya solamente porque se estaba muy a gustito, en la terraza sin mucha gente y sin agobios de coches aunque esté en plena Avenida Icaria.