Cocina de mercado pero porque está delante del mercado! Can Rabasseda es de esos lugares que conoces de hace años pero que por una razón u otra nunca entras. Ya sabes, la proximidad del lugar respecto a tu casa, verlo cerrado los domingos y el sitio donde está te hacen descartarlo. Un día hablando con una persona que no es de la zona pero comentándole que yo vivía por aquí me comentó algo de un restaurante Can Rabasseda. No sabía de que me hablaba. Me habló maravillas. Bueno, pues nada, a probarlo. Después del test como se pudo pasar por alto? Un sábado de trabajo matinal hizo que quisiera pegarme un lujo gastronómico. Digo lujo porque todo es a carta, bastante estática por cierto(aunque van cambiando las sugerencias), no hay menú. Y van cambiando las sugerencias por su espíritu de cocina de mercado mercado que está a 5 metros. Buen producto ese día en el mercado, sugerencia cambiada en la carta. Me pedí una ensalada de escarolas con beicon y foie. Todo a su temperatura correcta, escarola muy fresca(para detectar si una escarola está o no fresca apretarla con el tenedor a ver si hace efecto muelle o en cambio se queda chafada), beicon acabado de saltear/tostar y foie a temperatura ambiente. Una delicia. Plato pequeño pero muy ‘reparador del espirítu’. El segundo, bacalao con mermelada de tomate y tomillo. Es un plato para ponerse a llorar. El bacalao meloso como nunca lo había probado. La mermelada de tomate un punto dulce peleándose con el punto salado del bacalao. Y el tomillo recordándome que estaba ahí a cada momento que iba separando los trozos del lomo como si fueran hojas. De postre un helado de Pedro Ximenez. Creo que de manufactura propia aunque me quedó la duda. Fue lo menos sorprendente de los tres platos. Yo comí fuera, por tanto, si tenéis pensado ir llamad para reservar.