Cata 50

Justo en la frontera que separa Triana de los Remedios (pero en la parte de Triana según los trianers). Llegué a este sitio y las expectativas no eran muy allá. Leí unas cuantas reseñas y pensé que no me gustaría demasiado, sin embargo, 4 estrellas me parece una buena puntuación para este sitio que resultó estar bastante bien.
Tienen platos diferentes y que están bastante ricos y las tapas y medias raciones están bien de cantidad. La relación calidad/​precio es buena y el servicio a veces se equivoca, pero tiene arte y resuelven bastante rápido.
Solo he ido una vez y pedí el pollo crujiente con mayonesa de wasabi (tranquilos, no pica demasiado) y el pollo con curry, arroz, pasas y manzana. Todo estaba muy rico, una amiga se pidió una tapa de rollito de solomillo que tenía muy buena pinta y que no dudaré en pedir la próxima vez que vaya.

Local con una decoración muy moderna que bien cuadraría en el centro. Se agradece un sitio así en los Remedios, muy espacioso con mesas tanto pequeñas como grandes para grupos.
En lo que respecta a la carta, tienen muy buena pinta todos los platos pero solo he ido a cenar una vez con mi pareja y pedimos los raviolis (fritos y pequeños), rocas de bacalao con gulas (buenísimo) y berenjena con presa, queso y cebolla caramelizada (mmmm), por lo que tampoco puedo hablar mucho, aún así, todo de buena calidad a buen precio. Igualmente tienen una amplia carta de vinos.
Lo único que no me gustó, fue el trato del servicio. Una cosa es ser simpáticos y otra muy distinta es aplicar un lenguaje con los clientes como si estuvieras en el barrio y todo el rato tocándome el brazo y hombro. Me encanta el buen trato con los camareros y hasta yo misma soy demasiado extrovertida pero superar ese punto es algo desagradable. Aún así, volvería sin pensarlo, es algo puntual a no tener en cuenta pero que debía comentar.

Cata 50 es el lugar perfecto para venir con la familia o amigos a pasar un rato muy agradable. Es un bar donde puedes desayunar, tomar una copa o tapear al mediodía o para cenar.
Yo aún no he podido probar gran parte de la carta pero tiene una pinta deliciosa. Hay quesos y carnes que si saben como suenan… ¡qué delicia! También otra de las cosas destacadas de este lugar son los vinos. Si eres un amante de estos caldos, tienes que venir a probar algunos.
Respecto al lugar y la decoración, te invitan a quedarte para siempre. Acogedor y muy confortable, tiene una estantería bastante grande, llena de revistas, incluso en diferentes idiomas, sobre muchos temas variados, para que puedas ojear mientras tomas un desayuno o café distendido. Además, al ser un local tan amplio, es cómodo por si vas con niños.
Muy recomendable ir a Los Remedios sólo por pasarte por Cata 50. Yo aún tengo pendiente varias tapas de la carta, así que repetiré.

Great tapas, but they don’t speak English so be prepared for that. The chipuron dish (was calamari with cabbage) was one of our favorite dishes in all of Sevilla, the fried egg and prosciutto was salty but excellent and the mini hamburger was good too. Somewhat of a hidden location among the buildings but a great find!

Cata 50 es uno de esos bares que quizás pasaría algo más desapercibido en otra parte de la ciudad pero estando donde está, la calle República Argentina, llama mucho la atención ya que no abundan por la zona bares con tapitas originales a precios razonables.
Yo no frecuento mucho la zona por lo que cuando una amiga me comentó la existencia de este bar dije ¿por qué no?. El local, tiene una decoración moderna y bastantes mesas en su interior, tanto altas como bajas.
La carta es bastante amplia y ofrece desde desayunos hasta tapas para la hora de la comida o de la cena, yo solo he probado las tapas así que no podré opinar sobre los desayunos que tendré que probar en otra ocasión. Además también ofrece algunas tapas fuera de carta que van variando según la ocasión.
En mi caso, probé tres tapas: las croquetas (como no), el ravioli de pato y el rascacielo de morcilla, queso y huevo. Las croquetas estaban buenas pero no espectaculares y la tapa me apreció algo escasa, las otras dos cosas en cambio, me encantaron, sobre todo el rascacielo de morcilla queso y huevo que sin duda, fue lo que más me gustó de toda la cena.
La atención del camarero fue bastante buena aunque también hay que decir que el bar estaba casi vacío y el precio de las tapas lo encontré correcto para la zona y la calidad y atención recibida.
En definitiva, este es un bar para tener en cuenta si ando por la zona aunque no creo que merezca un desplazamiento específico para conocerlo.

Cata 50 is a great restaurant! Conveniently located right in the heart of Los Remedios, it truly is a gem. I’ve been many times since I began studying abroad, and they have great drinks and tapas. All tapas is very reasonably priced, and the waitstaff is very friendly. Definitely would recommend.

Sólo he ido a desayunar y a tomar café en contadas ocasiones. Pero me ha llegado por parte de muchos conocidos que no se come nada mal. En plan menú ejecutivo, para todas las personas que trabajan en la Avd República Argentina, que son muchos.
El local es muy amplio y tiene mucho espacio. La única pega que le veo es el nivel de ruido, pero claro, el establecimiento no tiene la culpa de eso. La decoración es muy atractiva y acogedora.
Buon Appetito.

Me encanta este sitio, el ambiente es muy tranquilo y entre semana no hay problema para encontrar mesa, por lo menos por la noche. Como han comentado otros Unilocalers el local es bastante espacioso y tiene bastantes mesas.
La carta es muy variada y puedes encontrar tapas muy creativas de revueltos, ensaladas, carne, pescado, etc. La relación calidad-​precio es estupenda, las tapas rondan los 3 euros pero la cantidad es muy buena.
Es díficil recomendar platos porque está todo delicioso pero el rollito de solomillo está genial, el solomillo a la carbonara, las habitas baby con langostino tienen un sabor sorprendente, vamos que es raro que una tapa te defraude.
Su carta de vinos podría ser más extensa pero por lo menos hay varias opciones de rueda, albariño, rioja, e incluso tienen alguno del bierzo.
En definitiva, una estupenda opción si andas por la zona, la única pega es el hilo músical, no por alto sino porque no es mi estilo pero no dudes en venir y comprobarlo por ti mismo :)

Cata 50 me gustó y para mí uno de los recomendados en el barrio… Había pasado muchas veces por la puerta pero nunca me atreví a entrar, no se si porque cuando pasaba parecía vacío, o por su localización, calle en la que solo hay restaurantes típicos de franquicias (mac, vips…). Pero el otro día queríamos probar algo nuevo y dijimos también viendo las reseñas de los Unilocalers dije vamos a probarlo.
Entre los comensales hubo diferentes opiniones… Pedimos varias tapas foie plancha, paté de carrillada (fuera de carta), atún plancha, bacalao con costra de almendras, tataki de atún y habitas baby. La valoración general fue buena aunque con algunos peros… el atún plancha algo seco y el bacalao en costra demasiado frito.
Sin embargo, el tataki de atún y el foie estuvieron delicioso! Me quedaron muchas cosas por probar, así que tendré que ir próximamente. ;)
La presentación de los platos y la atención me parecieron muy buenas. El local amplio, con buena decoración diferente a lo que sueles encontrar en los remedios y el precio de la tapa unos 3e, pero son tapas abundantes, está bastante bien.
Mi valoración general del local, buena. Si pasas por los remedios vete a probarlo!

Mas dificil que dormir de piey mas raro que un documental en telecinco asi es como era encontrarme o convencerme de entrar en esos sitios que por tendencia o coincidecia divina incorporan lo de ‘gastro bar’ a su defiinicion habitual. He tenido tantas malas experiencias que si podia, los evitaba.
Pero algunos compromisos son ineludibles y mi cita con Cata 50 estaba pactada para la noche del ocho de noviembre. Llovia a raudales y mi pie estrenaba un esguince leve, pero nada de eso evito mi destino. A las 22:30 cruce el umbral de Cata 50, no habia vuelta atras.
Ubicacion.
En el corazon de Republica Argentina, a pocos metros de SEVICI, METRO, TUSSAM y el transporte por excelencia de las abuelas de pelo escaldado: Taxi.
Lugar, Decoracion, Distribucion.
El sitio esta decorado alegremete, las sillas y mesas son cada una de su padre y de su madre, unas altas, otras chicas, unas pa gordos, otras para menos gordos, es como aquel anuncio de cocacola pero con una conjuncion y estilo que resultan graciosas y agradables; no es como la amiga feilla que te venden como ‘mona’ no, es un sitio que entra por el ojo, te sientes en un sitio moderno y jovial. Sabes que no hace falta venir bien vestido porque te sientes comodo. Hay espacio y aquel refran de «todo cabe en un jarrito, sabiendolo acomodar» se aplica a la perfeccion.
La Carta.
Variada y de buen precio. Me encanta que exista un poco de todo y que incluso tengan menu infantil. La carta no es muy extensa, pero lo que tienen cubre las necesidades de carnivoros, gurus de la comida exotica, tradicionales, hipsters, vegetarianos radicales y personal de a pie. Aqui el unico punto flaco que le veo es que no habia muchas cartas para la mesa… seriamos trece y en solo teniamos dos cartas para curiosear, no obstante en las paredes tambien tienen puestos los menus, asi que no era tanto problema, aunque coincidiras conmigo que si uno no mira la carta, al pedir se siente algo… desnudo.
La Comida
¿sabeis que es de agradecer?, que la presentacion de los platos entre por los ojos. En serio, podeis mirar las fotos que muchos Unilocalers han puesto y podeis estar tranquilos porque no cambian un apice. El sabor acompaña y las combinaciones estan hechas con sentido, quiza mi punto en contra es que no sean platos muy ‘contuntentes’, siento que se agradeceria un poco mas de cantidad dependiendo en que plato, pero si que se compensa por el sabor que tiene… todo delicioso y en su punto.
El Servicio
Cordial, eficiente y con detalles. ¿Que necesitas que te echen una foto con todos los amigos? el camararero te la toma. ¿que llevais una tarta hecha de casa? sin problema la puedes guardar y despues sacar en tu mesa ¿que necesitas reservar? hecho ¿no sabes que pedir? te sugieren de todo intentando que se adapte a tus gustos.
Este es el trato que muchas veces deseas, el de toda la vida, el de la profesionalidad, el de un tio que intenta que la experiencia de comer en un sitio sea completa y entiende que empieza con el y termina con el.
Conclusiones
A Cata 50 le queda aun un largo camino para ser un ‘must have’ de Los Remedios, los ingredientes los tiene y apuntan muy alto de
siguen por este camino seguro que no defraudaran y si mantienen el precio, sera la guinda para este bar que con gran desparpajo y alegria trae aires frescos a los fogones ‘de este lado del rio’.
Larga vida Cata 50!

Hace ya mucho tiempo que fui, pero creo que es bueno dejar algo escrito, porque el resultado estuvo bien.
Sabía de la existencia del negocio porque había pasado varias veces por la puerta, pero por la gente que vi (prejuicios, culpa mía) por detalles varios, no me invitaba a entrar. Pero un día, unos amigos estaban allí y yo andaba con una amiga decidiendo plan, así que esta era una buena opción.
El sitio estaba bien, tranquilo, bien decorado y creo que la silla a lo mejor un poco incómoda, pero también me senté donde pude porque eramos unos cuantos y sin avisar.
Ya hace tiempo y no recuerdo bien, pero pedimos varias cosas y estaba todo muy rico, yo se que lo mío fue carne con una salsa muy sabrosa, así que salí muy contento, aunque admito que no he vuelto a ir, por lo que… voy a bajar una estrella mi puntuación, no he echado de menos el sitio, así que tampoco será para tanto.
#LunesDeReseña

Mi pareja y yo queríamos ir a otro lugar nuevo para desayunar, y más estando Vips cerrado por reformas, y nos adentramos en el mundo de Unilocal para ver las opiniones de este establecimiento.
Al entrar ya vimos la cantidad de gente que viene para desayunar y que los camareros (1 en teoría por las mesas) no daban a basto para limpiar las mesas. La primera sorpresa es no saber que tenían como desayuno, estábamos algo perdidos porque no tienen carta de desayuno.
En cuanto al desayuno en sí, tomamos el pan gallego (que estaba bueno) con tomate (rico, no era el típico rayado) y jamón (que estaba bueno pero estaba cortado extrafinísimo y con el pan gallego no se nota absolutamente nada). El café con leche estaba bien, no estaba malo. Un detalle fueron los vasos de agua, que tanto se pide en Sevilla y que no hicieron falta pedirlos.
El precio me pareció un poco alto aunque todos sabemos que los desayunos en Sevilla pueden ser caros según el lugar.
Volveré en alguna ocasión para comer, para comprobar qué tipos de platos tiene y tener una valoración más general del establecimiento.

La verdad es que lo visité hace tiempo para desayunar y no me gustó nada, pero… debo confesar que hace poco volví a probar y me encanta.
En El Cata cuidan algo que valoro mucho de los desayunos: el pan. Para mí es fundamental. Puedes elegir entre pan gallego o pan de cinco cereales. Están deliciosos! Y el precio es más que justo. No es de esos sitios que te la cuelan por ponerte algo más especial.
Definitivamente estará en el olimpo de mi lista de sitios de desayunos en Los Remedios

Hace un finde quedé con unos amigos Unilocaleros para ir a este sitio, que tenían pendiente de visitar en su lista. En un principio pensé «ubicación y fotos me dicen que será carísimo»… Para mi sorpresa, no tuvo nada que ver con mi pensamiento.
El lugar es de estilo algo chic-​caótico pero muy acogedor, de hecho, a lo tonto de ser 4, fuimos 5 y de ahí 7, todos en la misma mesa que nos pusieron sillas y estuvimos muy cómodos.
La comida estaba de rechupete, entre los 2,50 € — 3,50 € la tapa (recomiendo el pollo al curry con arroz y pasas), muy bien presentada, así como los camareros fueron amables y rápidos con el servicio. Cabe mencionar que tienen WiFi gratis aunque no pudimos conectarla, a pesar de que nos dieron la contraseña.
También poseen postres pero ya nuestros estomagos estaban a tope, así que lo dejaremos para la próximo. El local es tan cómodo que nos invitó a quedarnos durante un buen tiempo charlando de múltiples temas… Habrá que repetir!

Sorpresa más que grata la de este bonito local ubicado en plena República Argentina y que, afortunadamente, apuesta por una cocina de calidad con tapas elaboradas, abundantes y sabrosas a muy buen precio. Digo afortunadamente porque por la zona lo que predominan son los locales de rancio abolengo, cofrades, taurinos o todo a la vez. Que Cata 50 apueste por algo innovador, diferente y a buen precio en una zona tan estigmatizada es más que de agradecer, así que ahí va esta reseña.
Lo primero que sorprende es la amplitud del local, lo bien distribuidos que tiene los espacios y la decoración tan atractiva que ofrece a sus visitantes. El mobiliario puede parecer caótico, pues mezclan mesas altas con bajas con otra enorme de madera para doce personas y sillas de varios tipos, pero mirándolo en perspectiva nos damos cuenta de que todo está pensado. Tanto las columnas como las paredes están repletas de enchufes, algo que para los electroyonkis de la tecnología como yo es algo más que de agradecer. Para colmo, tienen WiFi gratis.
En cuanto a la carta, su repertorio va desde los desayunos hasta las cenas, aunque yo todavía no he probado las tostadas, apuesto a que si están igual de buenas que el resto de cosas, son un acierto seguro. Apenas he estado dos veces, una para tomar una cervecilla rápida y otra cenando con amigos. Hicimos reserva para tres, pero al final entre check-​in y redes sociales nos acabamos juntando nueve y en ningún momento nos pusieron pegas o malas caras, sino todo lo contrario.
Pero como decía, la carta está estupenda y además de ofrecer una buena selección de vinos, predominan las tapas y las ensaladas, todas con una pinta genial. Como éramos muchos, pedimos muchas cosas y la mayoría, por no decir todas, estaban de rechupete, con precios que no superaban en ningún caso los cinco euros y que están bien servidas.
Estoy seguro de que volveré pronto para seguir probando cosas de la carta y, aunque no esté en una zona que frecuente mucho, merecerá la pena el paseo hasta allí.

En plena República Argentina, insigne calle de Los Remedios, y abierto desde el verano de 2012, encontramos Cata 50, uno de esos negocios que avisan de que una zona empieza a renovarse en lo que a hostelería se refiere.
Cata 50, resulta una propuesta fresca en su entorno y pretende aunar tanto a la clientela que asiste a este tipo de establecimientos en su agenda de ocio como a esa que come fuera en mitad de una jornada de trabajo o toma algo al salir de él.
Para ello el amplio local de Cata 50 intenta construir distintos ambientes, con zonas de estar para tomar un aperitivo o una copa y mesas pequeñas y grandes para comidas o cenas más reposadas. Una curiosa colección de muebles asume la mayor parte de la responsabilidad de la ambientación del establecimiento, distintos tipos de sillas de madera, unos preciosos taburetes también de madera, mesitas bajas o un estupendo sofá tipo chester aparentemente desgastado por el uso.
La oferta de Cata 50 es amplia y atractiva, un numeroso conjunto de tapas, a un precio bastante razonable, convierte la elección en una difícil tarea. Destacan entre ellas las croquetas de caña de lomo, los ravioli de perdiz o el tatin de tomate. La carta de postres también es bastante amplia por lo que es conveniente dejar un hueco para probarla.
El servicio es muy agradable, los encargados se muestran cercanos sin dejar de ser por ello profesionales y el ritmo con el que las tapas salen de la cocina atendiendo al transcurso de la comida es ejemplar y deseable para muchos otros establecimientos de la zona. Resulta destacable el interés que ponen los camareros en la evaluación de los comensales, síntoma de su deseo de atender cualquier posibilidad de mejora.
Sin duda, Cata 50 es un establecimiento que hará que mucha gente cene o coma por la zona y que repercutirá positivamente en la renovación hostelera de esta zona de la ciudad.

Un buen sitio nuevo para ir de tapas con una propuesta interesante en su carta.
El local es amplio y está decorado con muebles de diferentes diseños, algunos de ellos bastante bonitos, como un sillón chester que invita bastante a tomarse una copa.
Dentro de la carta destacan las croquetas de caña de lomo, el ravioli de perdiz y trufa o el tatín de tomate con queso. La carta es muy extensa y apetece probarla toda. Además de tapas, tiene tostas y ensaladas.
El sevicio es muy atento y simpático y como el sitio es nuevo están abiertos a cualquier sugerencia que los haga mejorar.