Silvani

Me encanta esta tienda, su olor y su cuidado aspecto. Es entrar por la puerta y sentir como se relaja la vista ante esa cantidad de flores y plantas. Y eso que la tienda no es muy grande, pero es suficiente para pasar un buen rato fijándote en cada una de las macetas y adornos florales.
Y mira que yo no era muy de flores y plantas, pero cuando llegó el momento de pasar por el altar no buscaba complicaciones en el tema floral, así que me dirigí a Silvani por recomendación de mi madre, que gran acierto.
Le expuse que quería una decoración sencilla para la iglesia y el coche, un ramo para mi y otro para regalar. Todo quedó perfecto, sencillos lirios naturales adornaron los bancos y el vehículo, seis rosas de largo talle sin más adorno que una cinta iban en mi mano y un colorido ramo alegró el día a una de mis invitadas. Ella misma se encargó de todo, con mimo y a un precio muy razonable.
He vuelto varias veces, a por regalos, y a que me ayudara a darle otro toque a mi casa. A veces le he llevado un jarrón, le he dicho lo que buscaba y con mucha gracia ha creado el rincón perfecto. También he adquirido jarrones y recipientes, así como flores artificiales a las que solo les falta el olor. Y un punto más a su favor, sirven a domicilio.
Otra de sus especialidades son los ramos para regalar, pero no cualquier ramo, si no los hechos con billetes. Nos regalaron uno muy chulo en el que cada flor estaba compuesta por cuatro billetes de cinco euros. Original a más no poder y un trabajo de enanos, no lo digo por la florista, que también, si no por nosotros que pasamos horas desenredando cada florecita, aunque, eso si, al final valió la pena el esfuerzo.