Amor Sports

Esta es una tienda con sentido del humor. Claro que sí, como tiene que ser. Que es eso de ponernos serios cuando vendemos katanas, espadas, pistolas o metralletas. Una persona con sentido del humor llama AMOR a una tienda así.
Ya más en serio, esta es una tienda ideal para todos los amantes de la caza, para fanáticos de la guerra (sus reproducciones asustan de lo reales que parecen) y para todo aquél que en algún momento necesite este tipo de productos (las veces que he estado allí han sido acompañando a mi primo, un fanático de los balines y el aire comprimido).
Si vais andando por la calle Tallers su escaparate os llamará la atención.

Desde chiquito me gustó jugar con soldaditos de plástico. Veía a la guerra como si fuera una película, algo heroico y donde el personaje principal siempre acababa enrollado con la tía más guapa. El tiempo ha pasado y ahora entiendo lo que significa la guerra real. Pero es curioso como aquella idea romántica de heroísmo sigue latente en mí. Supongo que por eso me gustan los juegos de ps3 de guerra o el paintball. Pero estos no son los únicos. Hay otro juego llamado Airsoft que me hizo venir a esta tienda.
En Amor Sports se especializan en la venta de uniformes, accesorios y réplicas de armamento real, pero adaptado para disfrutar de este entretenimiento. Que consiste en disfrazarse de soldado (cuanto más realista mejor), y enfrentarse a otra facción en un campo de batalla simulado.
Me interesaba un presupuesto para tal vez, unirme a algún grupo de estos. Al entrar en la tienda había un niño de unos 14 años con su madre y hermana menor probando un fusil AK– 47 dando muestras de admiración por el realismo de la réplica. Debo admitir que me pareció un tanto bizarra la imagen familiar toqueteando sonrientes una ametralladora.
Si deseaba cumplir con mi cometido allí encontraría de todo, desde botas hasta ropa camuflada y municiones de bolitas de plástico, que son las que se usan en este juego. Por unos 130 € conseguiría esto, más entre 300 € y 100 € por una réplica de fusil. donde el más caro es totalmente de metal y el más barato de plastico, pero de un parecido alarmante.
En este momento no dispongo del dinero para emprender tal empresa, pero llegado el momento ya sé a donde acudir.
Para los fanáticos de los complementos militares este lugar puede llegar a ser su perdición. Es que tienen de todo, desde uniformes de campaña hasta réplicas de armas que disparan balines de plástico. La mayoría de sus clientes son personas que juegan a una especie de simulación de combate en escenarios reales, que consiste en formar dos equipos totalmente equipados como los ejércitos reales y luchar como sacados.
Un lugar muy curioso.

Más allá del nombre, curioso para una tienda de artículos deportivos con armas en el escaparate, el aspecto general de este establecimiento es muy pintoresco. Como otros locales del Raval, un barrio en constante transformación, su look vetusto y familiar choca con un entorno donde ya predomina lo cosmopolita, lo global (mejor o peor entendido). Pero Amor Sports sigue siendo un comercio con mucha razón de ser, pues su especialización en la venta de material para la caza y la pesca deportiva (¿una práctica también anacrónica? No lo creo) lo hace destacar entre la homogeneidad.