I’d been meaning to go to this restaurant for awhile and am so glad I finally did! The food was incredible and the service couldn’t have been better. This small restaurant has a classic, cozy feel which was perfect for lunch. Every dish we had was excellent, but the bravas, lamb, and cheese/apple/yogurt dessert were outstanding. I highly recommend Bohemic!
Nila C.
Évaluation du lieu : 5 Los Feliz, Los Angeles, CA
First of all, the staff is incredible! Laura recommended a series of dishes to us that we’re absolutely delicious. Wine selection good again, she recommended a good match for the food. We had lamb, pork cheeks, beef all of these were totally out of this world. To finish the meal, we told her to surprise us with a good dessert, she brought something called«borracho» which was a brownie with a little bit of rum and vanilla ice cream. When eaten all together the balance was perfect ! We are planning to go back this week.
David F.
Évaluation du lieu : 5 Barcelona
Un restaurante que no deja indiferente a nadie, con el chef Mandu a los fogones. A mi me encanta y he ido varias veces, tiene personalidad propia en lo que hace, no es un más de lo mismo y sus patatas bravas son de las 5 mejores de Barcelona sin ninguna discusión.
Santiago D.
Évaluation du lieu : 5 Barcelona
Gran sitio para ir a comer, degustar, divertirse con sus platos de street food de alta cocina. Siete platos y todos son excelentes. Uno de mis favoritos.
Calvin K.
Évaluation du lieu : 5 East Brunswick, NJ
After reading the NYTimes article, I was able to get the 38(Euro) dinner menu consisting of 1 app, 3 entrées, and 2 desserts. The meal itself was phenomenal especially after eating tapas for the past few days. The highlights were the traditional potatoes as the appetizer and the earl grey ice cream dessert served at the end. The waiter recommended a great wine to pair with our meal and it was probably the best meal I had in Spain.
Mariano H.
Évaluation du lieu : 4 Barcelona
Cenar en Bohemic es haber encontrado la aguja en un pajar. Es un local pequeño(recomiendo reservar), bien decorado, con una carta corta pero esquisita. Su propuesta se fundamenta en tapas(o pequeñas raciones) muy elaboradas y diferentes al status quo que reina en locales de su alrededor De entre los mismos quiero destacar las bravas y un pato pequinés que te traslada al mismísimo Beijing.
Jordi O.
Évaluation du lieu : 4 St Vicenç dels Horts, Barcelona
Alucine de Bravas!(Que quede constancia que no he probado las del Bar Tomás) Fui por recomendación de un amigo Unilocaler Edu B. y la verdad es que acertó de lleno. Estuve en la mini terraza y se agradece mucho en verano. Los platos eran exquisitos, estuvimos hablando con el dueño y nos comentó que el cheff era su hijo, que ha estado en buenas escuelas de hostelería… Ni que lo diga!!! Solo deciros que guardéis un huequecito en el estomago, para los postres ciertamente son de otra dimensión, van cambiando mucho la carta pero no os preocupéis, a cual mejorrrr!!!
Mental
Évaluation du lieu : 5 Hamburg, Germany
I like to eat where it is about the good food and the true ambience, rather than about the designer glitz. So this is one of my very favorite places in BCN. Familiy business, in the true sense. Very cosy ambience, and VERY good food. Crossover between experimental and classic catalan cuisine. Not cheap, but far from expensive.
Edu B.
Évaluation du lieu : 4 Barcelona
Jorge lo ha descrito con tal precisión, que hay poco que añadir: –Desde hace un año tiene una miniterraza –Hace un año cambiaron los platillos por una serie de menús degustación –Hace poquito han vuelto hacia atrás y han recuperado cosas de las cartas antiguas. –Nos pusieron un surtido de tomates de nosecuantos colores, del huerto urbano de un amigo suyo(fuera de carta), que nos dejó de piedra. –Insisto en lo de los postres, son algo de otra dimensión.
Jorge B.
Évaluation du lieu : 5 Barcelona
Sábado nueve de la noche, mis padres, mi hermano pequeño y mi mujer. Cena en el bohemic. Local pequeño, pero con un ecanto especial, solo seis mesas y muy importante, un turno. Decoración francesa amenizada por un jazz de los 50 fabuloso. La carta es corta, lo que permite al chef centrarse mejor en los paltos y aumentar la calidad de los mismos. Consiste en unos tres entrantes a elegir y tres opciones de menu. Para empezar pedimos dos raciones de patatas bravas, de obligada elección, que estaban impresionantes, muy buenas, con una salsita barbacoa que tenia un picantito muy particular, de las mejores que he tomado, al nivel del Bar Tomas, Bar Cañate y las del Arola. Un par de bueñuelos de bacalo, bastante buenos, todo y que no superan a los del Windsor. A partir de aqui los menus. La idea es intentar que todos los comensales eligan platos distintos, en la medida que se pueda, y así de esta manera probar más cosas. Pedimos Steak Tartare, fabuloso, de los mejores que he probado, meloso, y en su punto de picante, lo prepararon en mesa y al gusto, al nivel de Windsor o del Hotel Claris, carpaccio con piñones y nuve de manzana, una maravilla, risstto, no recuerdo que tenia, lo que si es que nos encanto, y al que le añadiero un poco de trufa rallada, lo que le dio un toque espectacular, operación que realizaron en mesa. Costellar de Cerdo, la sorpresa de la noche, un carne magnifica, jugoso, mantequilla pura, un diez. Magret de pato con lagonstinos, fino, delicioso, gran textura. Pedimos un pescado, que no recuerdo el nombre y plato con habitas que tampoco recuerdo bien, me tendreis que disculpar, seguramente fué el vino, o quizá la copa de después que me hace perder la memoria. De hecho de estos últimos platos no puedo opinar, pues no los probe, pero a juzgar por las caras de mis padres y sus comenatarios, no cabe duda de que estaban deliciosos. Surtido de quesos, a destacar unos buenos del pais vecino y otros de elaboración casera exquisitos. Los postres merecen mencion a parte, todos, como no, caseros, muy elaborados. Os recomiendo que pidais el Secretos de Infancia, no os explico que es, pero os sorprendera y realmente cuando termines el postre entedereis el porque del nombre. El vino que pedimos fué un Pruno, Fincas Villacreces, Ribera del Duero crianza 2007, suave, color rubi, ideal para lo que pedimos en mesa. Por último cafes y trifásicos. Dos botellas. En mi opinió un templo gastronómico. Gran materia prima y todo muy bien cocinado, platos tradicionales pero con un toque moderno y una dosis de creatividad al mismo tiempo. En el bohemic te sienes como en casa, pero hay que reservar, y a ser posible ir a primera hora. Hay que tomarselo con calma, no sierven enseguida. El chef está solo en la cocina, los platos se preparan con mucho mimo y eso requiere tiempo. El servicio, compuesto por dos personas es my atento y profesional, sobre todo el camarero, todo un maestro. Pensar también que muchos platos los preparan en la mesa, dando una plus de espectacularidad al mismo, hecho este que relantiza otras partes del servicio. El chef del Bohemic, el gran Francesc Gimeno, estuvo en los fogones del desparecido Drolma, del hotel Majestic, uno de los mejores restaurantes de Barcelona. Eso lo dice todo. En fin, los cinco disfrutamos como hacía tiempo, Y en el bohemic, ese tiempo se detiene y es entonces cuando tú paladar disfruta y te dá las grácias por complacerle con semejantes manjares y mientas eso sucede vas llorando por dentro de felicidad. Precio: 50 – 60 Euros– No es caro, vale dinero. La calidad se paga.