LR

Festival de Pains LR es un horno que bien seguro podría estar en medio de un barrio parisino. Olivia Lasne-​Rochelle (LR) es franco-​catalana y ha sabido transmitir de forma exquisita la esencia de las boulangeries francesas que todos habremos visto alguna vez.
El local tiene una fachada de madera roja que llama la atención pero lo más destacable es que suele haber bastante cola dentro y fuera del establecimiento. Una vez dentro, el olor a levadura y a dulces inunda nuestros sentidos.
Tienen un surtido de pan que apetece llevárselo todo: baguettes tupidas y con costra gruesa y crujiente, panes de payés con una miga densa y aromática, croissants que huelen a mantequilla y postres delicados de frutas o chocolate que apetece comérselos a todas horas.
Para rematar, quiero hacer mención especial al servicio. Muy amables y con un acento afrancesado que apetece llevarse más de los que necesitamos comprar.
El único pero del LR es el precio. Es caro, no hay que negarlo, cosa que dificulta que podamos comprarlo como pan de cada día en grandes cantidades. Pero aún así, es tan bueno que es difícil resistirse a pasar por allí y no llevarse nada.

Pequeña panadería de estilo francés. Panes, bizcochos, bollos y repostería artesanal y hecha por ellos. Una de las mejores panaderías que conozco en Barcelona.

No soy ningún experto pero necesitan hacer una investigación de mercado o lo que viene a ser lo mismo, darse una vuelta por el barrio y echar un vistazo a la competencia.
Sobre los panes, es totalmente cierto que despachan un producto artesano de calidad y que el trato al cliente es muy cordial, pero eso no justifica unos precios tan desorbitados. Si tienes vecinos que ofrecen lo mismo a un precio menor, algo falla. No puede ser que vendan un pan a peso a más de 12 € el kg. y que a unas pocas manzanas encuentres otro establecimiento con el mismo producto (incluso mejor) y ecológico a 7 – 9 € el kg. O la mano de obra les sale muy cara o nos quieren tomar el ‘pan’. Por otra parte, tienen ese armatoste en medio de la tienda, una especie de cajero-​registradora que utilizan para cobrar. Tendrán sus motivos pero el aparato no hace más que afear un local estupendamente ambientado y si lo que buscan es vender artesanía y tradición, que el cliente deba pagar colocando monedas por una ranura es algo contraproducente.
Mi consejo es que o se dan un voltio por las cercanías y se replantean algunas cosas o morirán lenta y dolorosamente. «La verdad está ahí fuera».

Panadería-​pastelería fina, muy fina. La artesana Olivia Lasne-​Rochelle (LR), franco-​catalanta ha montado esta panadería-​pastelería de marcadisimo estilo francés en el barrio de Sant Antoni.
Es la tercera vez que voy a comprar sus panes. La primera fue azar, me llamó atención su fachada roja, llamativa desde lejos. Las dos siguientes, volví a por su exquisito pan desde la otra punta de Barcelona.
Cuando te acercas, lo primero que llama la atención es que suele haber muchos clientes esperando a que les atiendan sus simpatiquisimos encargados. El clima que se crea es muy agradable. Si tienes dudas sobre qué comprar los mismos encargados te orientan perfectamente. Es muy inspirador ver el cariño que le tienen a todos los productos que venden.
yo por ahora he probado su pan, que es maravilloso. Entre otras cosas que tengo fichadas, cosas que tienen muy buena pinta son sus macarons, los croissants y el pa au chocolat…
Como punto a tener en cuenta es el precio. Las chapatas, aunque grandes, superan los 2 euros y los panes especiales de sabores oscilan el euro/​100 gramos. Es caro, pero es indudable que es un producto de mucha calidad.
Todavía no tienen lugar habilitado para degustación. Aunque hablando con ellos, me dicen que lo tienen en mente…
Muy recomendable para quien aprecie la calidad del pan/​confitería