Para mí, el vermut más rico de Barcelona. Fundada en el siglo XIX, es casi un monumento más de la ciudad.
Oscar P.
Évaluation du lieu : 4 Montornès del Vallès, Barcelona
Vermuteria tradicional situada en el corazón del raval, muy auténtica y tranquila para poder charlar.
Daniel S.
Évaluation du lieu : 4 Barcelona
Lugar emblemático del Raval para ir a hacer un vermut. Lo sirven con la clásica olivita y el sifón. Ambiente tranquilo donde es fácil hablar y escuchar. Lugar auténtico con gente autóctona. Su aura modernista hace que con facilidad te distraigas observando el lugar. El servicio es correcto. El precio es adecuado en relación al buen vermut y al lugar histórico en el que te encuentras. En estos momentos están celebrando su 150 aniversario. Es un auténtico milagro que queden lugares como este en pleno centro de Barcelona. Un aplauso!
Antoni T.
Évaluation du lieu : 4 Barcelona, Spain
This place distills an ambience from another time, when the writers and painters were coming here to have their mid afternoon refreshment and a heated conversation about art and politics. The absenta was flowing freely and the ideas were running wild. Nowadays, it is one of the best conserved places. I am not coming very often here, but when I do I have their«vermut de l’oliveta», a vermouth that goes well at noon or at anytime of the day( ). It is a dark, almost dreamy atmosphere, place decorated as it was 150 years ago, with the small marble tables. pay attention to the statue that they have at the bar, I think I recall someone telling me it is the hunting goddess and it was from one of the 2 universal expositions that Barcelona host. Amazing.
Patricia Z.
Évaluation du lieu : 4 Berkeley, CA
Inviting, rustic bar from 1860. A nice place to relax for hours and people watch! I would recommend the vermouth, a nice savory wine with a hint of tarragon.
Andie J.
Évaluation du lieu : 4 Barcelona
He estado dos veces aquí, en ambas ocasiones con la misma amiga, y ninguna de estas veces la he pasado nada mal. Ubicado en pleno Raval, llama la atención y no puede pasar desapercibido: antiguo, modernita, con vida en cada espacio, no es para nada un lugar frío sino más bien acogedor, cuando voy me juego imaginarme cuántas historias han pasado, comenzado y seguramente acabado en alguna de sus mesas. Yo me pido siempre un vinito blanco y me la paso genial, hay suficiente espacio, no me siento agobiada, me atienden bien, si tengo hambre hay cositas para picar: quesos, chorizo, olivas, patatas. De verdad no defrauda, si no lo conoces, creo que te gustará :)
Sharon E.
Évaluation du lieu : 4 Barcelona, Spain
I love the woodwork, furniture, and the atmosphere here at Almirall. I’d say the rating is mostly on the ambiance, the history and just being here. As for drinks — prices are correct for the area… we only had beers. This is not a fancy shmancy place with«mixologists» or craft beers. Just a good old setting and a perfect place for a casual drink with friends.
Matthew W.
Évaluation du lieu : 4 Downtown Brooklyn, NY
I love Casa Almirall. As soon as you walk into this spot you’ll realize why it’s such a special place. Much of the furniture is original – having been maintained for decade after decade! Everything about Almirall exudes 19th century charm, from the dark lighting to the low-key atmosphere. This is a spot to come for an afternoon coffee or a late-night beer. Either way, you’ll be sure to have intimate conversation, or to run into someone you know(it always happens to me here!). In any event, Almirall is a special spot. A true neighborhood treasure that serves as a reminder of just how special businesses can be to the character of a neighborhood. Almirall is an historic bar, but one where many a good time can be had. I’ll most definitely see you there.
Dennis K.
Évaluation du lieu : 4 Oldenburg, Niedersachsen
Könnte etwas gemütlicher sein, versprüht leichten Hallencharakter. Insgesamt aber gute Stimmung, da immer voll besucht.
Daniel N.
Évaluation du lieu : 4 Barcelona
De qué es una casa bonita, sí. Qué duda cabe. Mi experiencia, la verdad comienza una noche extraña. De fiesta, sólo narraré lo confesable. Este es un portal decente, por tanto, vamos con cuidado. Siendo sincero, no recuerdo cómo salí de este Bar. Fue hace años y de noche, tal vez una noche de mayo. Lo importante es que a pesar de mi estado un tanto etílico, pude percatarme y apreciar el sitio donde me encontraba. Su ambiente bohemio me atrapó, de pronto me sentí en plena época modernista, rodeado de artistas, intelectuales, pintores, anarquistas, en fin lo más pintoresco de aquella Barcelona de comienzos de siglo. Sus decorados Art Noveau, su barra de mármol, el olor de sus paredes, de más de 2 siglos, impregna cada rincón del lugar. Te imaginas una de esas reuniones entre artistas, discutiendo alguna nueva trasgresora idea, que nos haga pensar, que el arte, no está muerto, al contrario, si entras aquí hace una copa, te darás cuenta que está más vivo que nunca.
Paula M.
Évaluation du lieu : 4 Barcelona
Sí, a mí me gusta. Me gustan las mesitas junto al ventana, esa tele local que es toda ventana de un bar. Y también el espacio(íntimo o tenebroso, según la hora) del fondo, con sofás y mesas absurdamente ancladas al suelo. Y su ambiente mixto de centrifugados aborígenes y extranjeros. Pobres extranjeros y turistas ¿los queremos encontrar en algún sitio? NO. Ni ellos mismos se gustan entre sí. Todo mentira. Odiamos que caminen como zombies, pero mola cuando los zombies se vuelven personas. Pues eso: lugar con suficiente predisposición como para hacer convivir gentes geoculturalmente estáticas o dinámicas, en diferentes modos de aceptación mútua, y en un bello escenario de evidente carga histórica que, además, está cerquita de algunas zonas claves para la vida del centro.
Carolina M.
Évaluation du lieu : 5 Barcelona
Una de las tabernas modernistas que aún se conservan en la ciudad! Bueno, precisemos. Su estilo pertenece a la época de la transición del neoclásico al modernismo. Así que se convierte en uno de los pocos ejemplos de este período artístico que aún se conservan en la ciudad. No hay que perdérsela, es una delicia. Entrar es transportarse a finales del siglo XIX, concretamente al 1860, cuando se estaba gestando todo el apogeo del modernismo catalán. La puerta de madera es auténtica y también la barra y las lámparas. Me gusta sentarme en las mesitas de mármol de la entrada y tomarme una cervecita, con amigos o sola. Cualquier opción en Casa Almirall merece la pena! No tienen menú de platos elaborados, pero siempre te puedes pedir unos quesitos, unas olivitas o unos embutidos. No sé porqué pero me transporta a al ambiente bohemio parisino de principios de siglo, todo y que mirando por la ventana te das cuenta que estás un poquito lejos de la capital francesa y que precisamente el acento francés no es el que abunda entre los transeúntes ;)) Además, con lo que está cambiando Joaquín Costa, creo que es un sitio ideal para empezar la velada y para perderse después por los nuevos rincones que están abriendo alrededor.
Laia O.
Évaluation du lieu : 4 Barcelona
Es un bar perfecto para una cita, es bonito, muy bonito, antiguo, modernista, pero hay que conseguir uno de los sofás del interior del local. Sinó, la entrada del local es más un bar normal con un poco de música. Este quizás es un comentario extraño, pero los baños del Almirall molan mucho. Tienen alguna tapita, pero no me gustaron precisamente. ¡Aún así soy fan!
Borja B.
Évaluation du lieu : 3 Barcelona
Hay bares cómodos, hay bares baratos, hay bares divertidos… y también hay bares bonitos. Casa Almirall es de esos últimos, pues ocupa un local con mucho encanto desde las ventanas a las butacas de su zona más interior pasando por la barra y el impresionante botellero de madera de estilo modernista que hay detrás de barmen y barwomen. Además de la exquisitez estética, la comodiad puntúa alto, dos conceptos que a menudo están reñidos. El resto de aspectos se mueve en parámetros de normalidad: precios tirando a altos pero sin salir de lo razonable, clientela habitual variada desde los 20 a los 40 años, música imperceptible la mayor parte del tiempo y sin una personalidad muy marcada… Gustará a turistas interesados en el modernismo civil.
Cristina M.
Évaluation du lieu : 4 Barcelona
Es uno de los bares más antiguos de Barcelona, fundado en 1860, y empezó siendo una bodega donde la gente iba a jugar a las cartas y al dominó y a pasar un rato tomando algo con los amigos. Lo que se sigue haciendo hasta hoy en día, vaya. Su fundador fue un ilustre barcelonés llamado Manel Almirall, hasta que cambió de propietario en 1976. De su decoración modernista, de motivos vegetales, destaca el mostrador de mármol catalán, las lámparas y la figura de hierro forjado con una mujer, que simboliza la musa de la Exposición Universal que aconteció en Barcelona en 1888. Tiene dos espacios separados por una mampara también modernista, que divide un espacio un poco más íntimo, de otro más luminoso y cercano a la calle. Siempre está lleno de gente y es muy animoso; el único inconveniente de esto es que a veces tienes que alzar un poco la voz para mantener una conversación. Más allá de las voces, se deja oír suavemente la música de jazz que suelen pinchar.
Bert A.
Évaluation du lieu : 4 Barcelona
Lugar Simpatico al lado del Macba y calle Joaquin Costa donde hay muchos buenos bares Una puerta masiva y que impresiona Al nivel de precios esta bien, ni caro, ni barato 2.80 € la Moritz por ejemplo El ambiente es bohemio, al fin un lugar agrabadable para ir de copas y conversar tranquilamente entre amigos