Quizás no sean las mejores bravas de Barcelona porque hay tantas variantes de bravas como hijos en la tribu de los Brady, pero a mí siempre me saben arreglar la tarde. Dos cañas y una ración por 5 €. Así volver del trabajo a casa haciendo parada técnica en el Pages hace que el final del día sepa mejor y con un suave punto picante :) Perfecto local para conversar con amigos o ver partidos del Barça con un público muy variado. Y todo esto en la cuna de la Rumba Catalana, la calle donde al parecer fue inventada a ritmo de cañas bien tiradas.
Carmen T.
Évaluation du lieu : 3 El Raval, Barcelona
Bar de Gracià con todo el encanto de restauración tradicional. Es perfecto para tomar tapas y comer. Me encanta para un vermut improvisado ya que el lugar es muy agradable pero con el suficiente espacio para no sentirte agobiado. Tendré que volver a tapear y probar sus bravas!!!
Sharon A.
Évaluation du lieu : 4 Barcelona
Un buen sitio donde comer de tapas o menú a buenos precios. El local es una especie de bar-restaurante de los de toda la vida tirando a rústico con mesas y sillas de madera. Pedimos varias cosas de picoteo: un plato de embutidos y queso(bastante abundante), pan con tomate(muy bien hecho y mucha cantidad), unas albóndigas(fue lo que menos nos gustaron), unas croquetas de pollo buenísimas(¡las recomiendo!) y un par de ensaladas muy buenas y abundantes con lechuga, atún, huevo duro, tomate…(tienen varios tipos de ensalada en la carta). En realidad creo que nos pasamos un poco… pero como los precios son muy razonables al final no pagamos demasiado. El servicio fue rápido y amable así que si buscas un sitio donde comer medianamente bien y barato por Gracia, esta puede ser una buena opción.
Fer G.
Évaluation du lieu : 4 Gràcia, Barcelona
Cada día paso por delante de este Bar y no ha sido hasta hace poco que porfin he entrado. El lugar y el ambiente es muy acogedor, igual que la atención del personal, amable y atento, y como siempre digo, se agradece. Lo consideraría de esos lugares BBB, BuenoBonitoBarato, ya que nos pusimos hasta las botas y no nos salió muy caro. Pedimos unas croquetas, que la ración son 4 y estaban bastante buenas. Un plato de embutido, con jamón del país, quesito, chorizo y fuet(hay pequeño, mediano y grande), unas albondigas, que posiblemente fueron lo más flojito de la mesa, acompañados con un buen plato de pa amb tomaquet y un par de generosas ensaladas, acabamos llenos. En la pizarra suelen poner diferentes tipos de oferta, asi que merece la pena un vistacillo. Me quedé con las ganas de probar la tortilla de patatas… y es que a partir de ahora, esa es mi prioridad! A ver si supera a la de mi querida suegra. En busca de la tortilla perdida!
Marcos H.
Évaluation du lieu : 4 Barcelona
Local de tapas típicas catalanas; Cerveza moritz(la de barcelona) y tapas hechas con mucho cariño(No dejes de probar las albóndigas oblas patatas bravas cortadas a mano por dios!) El dueño es un hombre mayor muy simpático, algo paternal, que siempre esta vigilando que todo vaya bien, desde la barra; las camareras muy agradables también, que siempre vigilan que tengas todo, son el otro punto fuerte del bar restaurante Una buena opción para ir a cenar con los amigos sin duda!
Carol P.
Évaluation du lieu : 4 Barcelona
Aquí uno puede pasar un buen rato, sobre todo si va con un grupito de amigos, ya que hay juegos de mesa con los que divertirse un rato si no hay un gran tema de conversación. Las copas no son caras y el local ambientado en madera y con buena música no muy alta permite que el rato pase amenamente. El personal es majete y te ayudan a decidir con rapidez si tienes un día confuso, es de agradecer. Buenos cocktails de caipiriña.
Paula M.
Évaluation du lieu : 5 Barcelona
¿El Pagès? «Yo conocí al Pagès, ¡al Pagès, en persona! hace más de cuarenta años» — Pedro es el propietario y es gallego ¡como yo! Y siempre(no, siempre no, a veces) que un galaico encuentra a otro(nada más fácil) se nos pone un aire de familia y entusiasmo, nos abrimos las puertas, nos llevamos del brazo hasta el salón. Y empezó a contarme: «Ahora los hijos del Pagès tienen ya 60 y 70 años». «Aquí, originariamente, el Pagès distribuíà la cerveza en el barrio, la cerveza que tomáis, la Estrella». «Esto, antes era cuchitril, yo lo reformé todo. El suelo, los portalones de madera.» «La mujer es la que cocina.» «El Pescadilla nació en una finca más adelante, también de la calle Fraternitat, pero el dueño no quiso poner la placa. Y entonces el Ayuntamiento me preguntó a mí y a mí me pareció bien. Y la pusieron.» Ahora Casa Pagès, lugar emblemático de tapeo en el Barrio de Gracia con una bravas y una tortilla de patatas deliciosas, tiene sucursal en Torrent L’Olla, 27. Por cierto, fantásticos los bocadillos filosóficos. Mi favorito es el Freud.
Pau P.
Évaluation du lieu : 5 Barcelona
Desde fuera, Casa Pagès puede parecer un bar más del barrio de Gràcia, sobrecargado en oferta de restauración. Nada más lejos de la realidad. Estoy hablando de un local centenario que ha sabido conservar lo más bonito de otras épocas y combinarlo con un toque joven y en boga. Hablo de un estilo ‘vintage’ real y no de postín. Hablo de un testimonio de otras épocas y no de post-modernidad superficial y buscada a la fuerza. Se trata de un local genuino y con personalidad donde uno encontrará comida casera de calidad servida con una sonrisa y mucha amabilidad. Y todo con unos precios muy por debajo de la competencia. Un espacio de clientela agradable, de diferentes edades, que respeta y armoniza, creando un ambiente muy acogedor. En Casa Pagès, uno consigue desayunar, comer, tomar un café, hacer unas cervezas entre amigos(porque nunca es una), cenar y hasta tomar la primera copa y, en cada uno de estos momentos, uno se siente en el bar o restaurante indicado para cada caso. Maravilloso, ¿no? En definitiva, quiero transmitir que Casa Pagès me parece un local de referencia, una gran opción para cualquier momento y para variopintas posibilidades de grupos, parejas o individuos solitarios. Si no lo conoces todavía, no dudes en acercarte y, si tienes opción, aprovecha para saludar al anciano propietario y escuchar su historia de vida. Toda una lección.