La SAVIDURÍAREBÉS es una casa de vinos, licores y cavas desde 1898. Negocio familiar que con el tiempo ha ido adquiriendo un prestigio merecido. En este establecimiento hay más de 400 referencias para investigar, degustar, aprender y repetir. El lema del propietario lo dice todo: Quien sabe degustar, no bebe vino: degusta secretos. Y es una verdad como un templo. SAVIDURÍAREBÉS organizan todo tipo de actos con la excusa del vino: Maridaje músca y vino, maridaje vino y cabaret literario, talleres de cata… El local dispone de una zona de cata donde la costumbre de la casa es maridar una tapa con cada vino para potenciar la experiencia. Representantes de distintas bodegas acuden regularmente a este local para presentar sus productos y hacerlos llegar al público que previamente reserva su asistencia.
Laia O.
Évaluation du lieu : 3 Barcelona
En esta bodeguita déjate aconsejar. A mí me conquistaron con un Garnatxa del Montsant. Mientras iba a pagar vi que tienen un montón de proyectos en mente, como por ejemplo hacer lecturas de relatos mientras se degustan unos vinos, pero aún lo están trabajando, así que dejé mi correo electrónico para que me informaran de sus actividades. Es esperanzador cuando encuentras un comercio que no sólo vende, sino que cuida de su establecimiento y de sus clientes, promoviendo actividades y ofreciéndoles lo mejor de sus géneros.
Núria G.
Évaluation du lieu : 4 Barcelona
Salvador Dalí decía que quien sabe degustar, no bebe vino: degusta secretos. Y aquí los tienen todos. Y te enseñan a paladearlos. Más de cuatro tardes las he terminado en esta bodeguita hablando con el anterior dueño, que ahora ya se ha jubilado. «Oiga, que me han dicho que los Cigales rosados están de morir», «ay, si, pero es que ya casi no llegan aquí…pero mira este también te gustará, mucho». Estupendos vinos, explicados hasta el detalle. Consejos acertados para cualquier ocasión. Cajas exquisitas de vino, cava, o champagne francés, a precios inmejorables. Antes era«la bodega de Borrell», ahora le han cambiado el nombre y se llama«SaVIDuría Rebés». Me parece un nombre de lo más acertado. La vid puede ser sabia si quienes la tratan y la venden lo son también. Isabel, que ha tomado el relevo de mi amigo el bodeguero, sigue esta filosofía.