Isabella’s

Uno de los mejores restaurantes que he ido. Siempre lleno así que es importante hacer reservación.

If you like the idea of dining in a room of collected eclectic furnishings (probably from estate sales, moving sales and the like) — you’ll love this dining room. I personally love a well-​curated room of re-​purposed (and good quality — not ikea) chairs and tables, and decorations. It gives the place an informal feel — like you’re in someone’s house, and not a restaurant.
As for the food — it was quite good. The steak was delicious. the steak tartare vuelto y vuelto (seared on both sides) was excellent, and same with the dessert of Lemon Meringue tart.
prices are on the high side — yes, this is an expensive neighborhood. And the Gin Tonics are 10 Euros each.
The terrace is definitely the place to sit when the weather permits — but I loved sitting inside & absorbing the ambiance.

En este lugar no se me habría perdido nada, sino hubiera sido por una amiga que me dijo: «aunque sea sólo para darle un vistazo vamos a verlo». Y fuimos un día como quien va de visita a un museo o una galería de arte. Nos atendió su relaciones públicas que tiene unas tablas de esas conseguidas después de unas cuantas reencarnaciones. El espacio es realmente espectacular, con una decoración entre kitch (a lo casa inglesa), con sillas de los 60, velas, candelabros, jarrones antiguos, pantallas de lámparas con flecos… Menos mal que dejaron de poner las figuritas de patos y pájaros: los hubiera tachado automáticamente de la lista.
La terraza es lo más sobrio y modesto, tal vez en exceso, después del derroche de su interior. Pero tiene muchos detalles pensados: plantas aromáticas sobre las mesas, mantas para el frío…
Y en cuanto a la comida, que es lo que en definitiva importa, decir que cuidan mucho las cartas, gracias a su chef, Andrea Fioravanti. Hay pica pica y entrantes a todas horas, unas novedosas pizzas a la plancha, pastas buenas como ravioloni de berenjena ahumada y pecorino, o risotto de alcachofas, llegando a las carnes y pescados. El menú degustación son: 38 € y comer a la carta cuesta entre 30 y 35 €. Oh, la la.