Una institución del barrio de Sants… En mi familia, desde tiempos inmemorables, cuando nos falta algún elemento de pastelería para fechas«señaladas»… a la Kessler !! Últimamente. estoy a dieta y evito, en la medida de lo posible, mirar(ni de reojo) los escaparates de las pastelerías, pero osé entrar y pregunté si tenían productos sin azúcar y bajos en grasas… La sorpresa que me dieron fué toda una alegría: tienen bombones, pasteles, etc… para dieta y además una nata fresca(por encargo) estupenda!!!
Laia O.
Évaluation du lieu : 4 Barcelona
Esta pastelería es un clásico en Sants. Viví tres años en la Plaça Osca y una de las primeras cosas que aprendí es que Sants es un barrio muy barrio y muy comercial, y que de entre las pastelerías, una de las de más renombre era la Kessler. Vamos, que si tenías que llevar un postre de alguna pastelería de Sants, más te valía que fuera de allí a riesgo de parecer una tonta foranea si no lo hacías. No me extraña, la fama es merecida en este caso u ¿os creéis que con la de sitios donde comprar en el Carrer de Sants la gente hace cola por qué sí?
Gisela B.
Évaluation du lieu : 4 Barcelona
Día de Reyes. No estaba en mi barrio y tenía que comprar el roscón. Un roscón bien molón porque en mi casa son, somos, de paladar fino y exigente ;-). El caso que yo… ¿Del barrio de Sants? ¡Ni idea! Pero pasé enfrente de ésta, la Kessler, y me dio muy buena pinta. ¿Por el look antiguo quizás? Puede ser. Tengo debilidad por estos comercios. El caso es que entré y… ¡Oh, oh, oh! ¡Una cola que«paqué»! ¿Buena señal? Por descontado. ¿Un rollaco total? ¡También! Pero esperé… Esperé charlando con la gente de la cola. En estas fechas ya se sabe… Todos somos más sociables… Finalmente llegó mi turno y pedí mi roscón. Tenían de nata, crema y chocolate pero yo me pedí en oficial. ¡El tradicional! ¡El de mazapán! Me lo sirvieron con rapidez y profesionalidad y ya está. ¡Lista para una diada de Reyes como Dios manda. Ya en casa, comimos, bebimos, charlamos y junto con el café… ¡El roscón! ¡A ver qué tal! Lo partimos, tal y cual pascual y… ¡Olé! ¡Triunfé! No sólo porque encantó a todo el mundo sino porque me tocó la figurita del Rey. Y es que no podía esperar menos de aquella delicatessen: ¡Calidad y justicia! Nota: si vuelvo por Sants, iré a ver qué tal el salón de té. ¿Se quiere venir Usté?
Daniel N.
Évaluation du lieu : 4 Barcelona
Recorrer el antiguo barrio de Sants es conectarse con uno de los lugares más bellos de la ciudad. A mí me encanta. Su belleza se traduce en la cantidad de lugares de antaño, que luchan a mano armada por sobrevivir. Y esto tiene mucho valor en nuestros días tan caóticos. Uno de ellos, es la Pastesseria Kessler — Galimany, negocio familiar, que lleva más de cincuenta años endulzando a sus clientes del barrio con sus manjares y sabrosos productos, para todas las tradicionales fiestas de Cataluña. Turrones y neules para Nadal, la mona de Pasqua, los panallets para la Castanyada, en fin todo un sabroso surtido, para degustar los mejores manjares de la cocina catalana. Tiene salón de té, ofrece caterings y servicios de fiestas.
Judith P.
Évaluation du lieu : 4 Barcelona
La pastelería, de 1950, elabora artesanalmente pasteles, bombones, brazos de chocolate… Girando la esquina se encuentra la cafetería, en la que hay un elemento que debería estar guardado bajo llave, pero no, está ahí en descarada exposición. El self service de repostería aparece desnudo sin pudor al alcance de la mano. Pero hombre, de toda la vida que los pasteles se guardan tras un cristal: permite atraer a la madre, que es quien paga, y ofrece un freno a la mano automática del niño. En casa guardamos incluso el cristal tras una servilleta, que amortigua el magnetismo del chocolate. Sólo reclamamos un poco de decoro, por dios; hay que vestir con decencia los pasteles.
Cristina M.
Évaluation du lieu : 4 Barcelona
La Kessler es como el País de las Maravillas para los amantes del dulce. Es una pastelería de mucha solera, con 50 años de oficio, ubicada en el corazón del barrio de Sants, en plena carretera. Además de encontrar todo tipo de dulces y bombones para preparar una de esas bandejas doradas, donde comprobarás el arte de experimentar en sabores y texturas, puedes también encargarles un pastel personalizado. También preparan caterings para bodas, fiestas, convenciones, congresos, fiestas privadas, etc. Alquilan una sala donde realizar los actos con cantantes y hasta magos si lo solicitas. Y para pasar una tarde azucarada puedes entrar en la cafetería, donde unas entrañables mujeres, que te recordaran a tu mami o tu abuelita, te servirán con mucha amabilidad.