Pork...boig per tu

Tapas ain’t got shit on this. Traditional Spanish and Catalan dishes. Don’t mess up the «Coca de Folgueroles» like I did!!! We are almost everything on the menu so stuffed writing this. Btw take some wine to go!

Cerdo. Cerdo y más cerdo.
Que no, que no estoy insultando a nadie, simplemente estoy describiendo, en una sola palabra, Pork, toda una oda a la carne de cerdo, en todas sus modalidades, como demuestra el cerdo colgado del techo. Aquí se viene a comer cerdo, así que si eres vegetariano, mejor busca otro restaurante :)
La carta puede resultar algo confusa al principio, pero como te lo cuentan y explican todo, no hay problema. Básicamente hay una sección de «despensa» en la que podemos pedir al peso chorizo, longaniza, sobrasada, lomo, jamón, etc. Luego hay una sección como de primeros, con platos de cuchara, platos a la brasa (txistorra, morcilla, papada, etc.) y platos al horno tanto para acompañar la carne (la escalivada, deliciosa ;)) como la carne en sí (costilla, panceta, cabeza de lomo, espalda, txuletón, etc.).
Ya veis, si os gusta la carne, disfrutaréis.

Best pork dishes I have ever had. Unbelievably good. It’s farm to table. The chef knows the farmers and how they treat their pigs. The Chorizo as a starter was gorgeous. The hams, the chops, the sausages, everything had great taste and was presented nicely.

Todo sobre el cerdo! Incluso con una parte de la carta al peso… Lo sumas a la Best Bitter del maestro de maestros Steve Huxley y tienes una combinación hedonista y de los más sabrosa…

Loved it. After 8 straight days of delicious tapas and fresh fish, my girlfriend and I wanted to try something a little different. This place was near the hotel and had a concept we both liked — all pork! Pictures and reviews seemed good so we headed over. It was a Tuesday night, we were one of only three or four tables. We speak enough Spanish to get by but the waitresses were all happy enough to talk to us in English and explain the cryptic menu.
Conceptually speaking, it’s everything I like: narrow and deep. That kind of attention to a single category nearly always offers knowledge that you can’t find in a more generalist approach. And at a restaurant, that translates to more flavors and attention to detail. «Pork, Boig Per Tu» is a study in pork and they differentiate by regions of Spain. We had flavors there that were richer and more exotic than anyplace previous. Standouts for me were the Leon, from Bierza (cold cut) and the Morcilla from Tolosoldea (grilled over their wood stove). The pork belly was melty good and the ribs were moist and chewy and more defined of a taste than your typical barbecue. But in a way, the real treasure is discovering the tastes of Spain, some more bland, some more exotic, and not attempting to pull a favorite, all the while receiving an education in the varied approaches to preparation throughout the country. The singularity of it all being pork is deceiving in that way as the meat itself serves as a constant that allows flavor and preparation to take more of the stage. And while their wine selection is minimal, their regional approach to the meats puts most wine selections to shame.
«Pork, Boig Per Tu» could exist seamlessly in the coolest areas of Los Angeles or Brooklyn and nobody would bat an eye with its artisan touches and home spun bread, signage and drinks. But while that somehow feels slightly inauthentic in a city so culturally affected by tourism currently, in fact, it felt more «of Spain» than much of the Spain I’ve encountered. And the irony of it all is that those particular flavors couldn’t be replicated anywhere else.
«Pork, Boig Per Tu» means“Pork, Crazy for You” and the phrase «Boig Per Tu» echoes the chorus of a Catalan song by the same name. Like much of Barcelona, it’s quirky and different. And despite only being open for a few months, one of the places where I felt I really got to know the city.
And my beautiful company didn’t hurt either. :)

Nada más al entrar, sabemos que el rey de este sitio es el cerdo, una figura representativa diseñada por Mikel Urmeneta (Kuxumuxu) colgada del techo, nos lo recuerda.
El local está decorado con un sinfín de detalles. Las bombillas Vintage se convirtieron en un accesorio ideal para causar buen gusto a primera vista, así como los cuchillos empleados para cortar el cerdo a modo de grifo de cerveza. Esto último me hizo mucha gracia.
Los detalles de calidad y originalidad fueron también un «Leitmotiv» en la carta. La cerveza por ejemplo, tenía su etiqueta de «Made in England» y las jarras para servirla eran tajos de cristal de conservas de toda la vida. ¡ Me quedé sorprendido!
La levadura que entra en la fabricación de esta cerveza estaba también presente en el pan el cual estaba delicioso.
Nuestro interés real se encuentra en el plato fuerte. Me encanta en gran manera la carne, así que me decliné en primera medida por degustar las sabrosas costillas de cerdo al horno. Sin duda alguna le doy un 10, ¡Estuvieron estupendas!
Mis amigos me acompañaron en la mesa. Ellos, con sus elecciones más ligeras escogieron el Tomate San Marzano con albahaca. Realmente fue exquisito. La «conserva» tiene todavía mucho futuro con productos de este nivel.
Morcilla de puerro Tolosaldea, también excelente!
Más tarde, vino a nuestra mesa la respuesta a «cuál es el porque de haber venido a este lugar». Se trataba de la cabeza de lechón tierno, todo un placer haberla visto servida delante de nosotros! Estaba recién pasada por el horno napolitano, lo que nos permitía apreciar su gratinada piel. Os comento que me vino a la mente la imagen de Asterix y Obelix comiendo jabalies enteros.
Hubo en mi paladar un festín de sabores y texturas. Pasamos de la crujiente y ligeramente caramelizada piel a pequeños trozos tiernos con sabores mucho más suaves. Fue toda una delicia de principio a fin.
Cabe mencionar que los vinagres (como la salicornia) vienen bien para ayudar a la digestión de tantos lípidos.
Al final de todo, acabamos nuestra cena con un refrescante postre de piña y helado de vainilla (receta de Pierre Hermé).
Tuve el privilegio de conocer a Oriol Rovira (Chef de Els Casal 1* Michelin) y Manel Jimenez (Chef Ejecutivo del Grupo Sagardi) que llevan adelante este apasionante proyecto.
En resumen «Pork boig per tu» con una carta inteligentemente diseñada alrededor de la carne porcina, aporta originalidad, diversidad y valor en el panorama gastronómico Barcelones.

Si el restaurante St. John londinense no tuvo ningún reparo en poner un cerdo como identificador de su restaurante, Oriol Rovira (de Els Casals con una estrella Michelin y de Sagás en Plà de Palau de Barcelona) ha puesto en el lugar que le corresponde el cerdo como producto estrella de toda la Península Ibérica, y particularmente de este nuevo restaurante: desde los jamones y lomos de Maldonado, sobrasadas, chorizos leoneses con su punto de ahumado, exquisita chuleta de cerdo negro de Bigorre elaborada en el horno de leña que queda jugosa, tierna y rosada. Todas las elaboraciones giran en torno al cerdo con unos acompañamientos muy interesantes que maridan a la perfección con los diferentes platos (dejaros aconsejar) Los postres y la carta de panes también está muy trabajada. Una cerveza inglesa artesana con 3 dedos de espuma para ayudaros a entrar en situación. Elegida carta de vinos y sorprendentes blancos para maridar con la carne del cerdo (la acidez de los blancos ayuda a limpiar la boca del exceso de grasa y esa misma acidez también nos hará salivar más con lo cual encontraremos más acentuados e identificables el resto de sabores). El funcionamiento de las comandas es por gramos como si estuvieras en una charcutería para todo el elenco de embutidos y de una carnicería para las diferentes elaboraciones de la carne como plato principal. Es decir puedes pedir 100 gramos de embutidos o 100 gramos de jamón ibérico de bellota Maldonado y de chuleta una pieza de 500 gramos aproximadamente para dos. De esta manera se puede pedir en función del apetito de cada comensal.