Tantarantana

Es uno de los que formarían parte del circuito de teatros alternativos de Barcelona. Tienen programación infantil y adulta. De ésta, apuestan por la dramaturgia de autores contemporáneos de la escena barcelonesa. Me gusta porque apuestan por el teatro de aquí.
Pensaba, recientemente, que toda la programación de este año sería en catalán pero no! el otro día fui a ver EXPRESS (marqué un evento en Unilocal) y era en castellano. Cosa que me sorprendió pero para bien. A mi me encanta que apuesten por la escena barcelonesa pero también me gusta que haya de todo y en todas las lenguas.
El teatro no es muy grande. El hall de espera es bastante pintoresco, lleno de posters y flyers por todas partes. Y luego el teatro en si es acogedor. Las butacas están colocadas a modo de anfiteatro y además tiene escenario (aunque forme parte de la red de teatros alternativos, no es una sala plana como otras).
Hace no mucho también abrieron el ATIC que es adjunto al teatro tantarantana y eso si que es más experimental y sin un escenario.
En fin, un buen teatro y que no es muy caro. Así que si tenéis ganas de ver obras os lo recomiendo porque estaréis ante un teatro donde la programación está muy bien y el precio no es caro.
Viva el teatro!!! :P

El Tantarantana es un teatro que no es ni muy grande ni muy pequeño y su programación no es ni muy comercial ni muy alternativa. Pueden verse propuestas de compañías jóvenes, pero también apuestas más personales de directores, actores o actrices de renombre. Sirve como plataforma para nuevos creadores y de espacio para dar a conocer a autores contemporáneos de éxito que, por un motivo u otro, no están presentes en las carteleras más comerciales. Una programación que puede interesar a un público muy variado y una sala confortable y pequeña para seguir la obra cómodamente desde cualquier localidad, dos motivos de peso para entrar de vez en cuando en la web y estar al tanto de lo que van proponiendo.

Este pequeño teatro escondido en una callejeula cercana al Paralel, es un lugar ideal para ver teatro alternativo de calidad. Ese que apenas se anuncia, y del que te enteras más por el boca– oreja que a través de las publicaciones culturales ya sean online u offline.
Los promotores de Tantarantana apuestan principalmente por obras de teatro contemporáneo y experimental. Historias distintas que te llegan al alma, gracias a lo encantador de sus instalaciones y a la complicidad que los actores suelen establecer con «su» público.
Además parte de su cartelera también la cubren con espectáculos infantiles (mimos, títeres, marionetas…) con funciones los sábados a partir de las 18h y los domingos por la mañana.
Amar el teatro se hace más fácil con espacios como Tantarantana. Y es que a veces las creaciones sencillas donde el diálogo es el principal transmisor del mensaje, son las que más satisfacción y deleite nos producen como espectadores.

Me gustan los teatros pequeños. Más que los grandes. Me gustan los teatros donde los actores no se han de dejar la voz para que los oigan al final. Me gusta el teatro de texto. Más que el de fanfarria y espectáculo. Me gustan las salas donde las butacas parece que suban hasta el cielo, de tanta desviación que tiene una fila respecto la otra. Me gustan los nombres difíciles de pronunciar. Me gusta el Tantarantana.
Teatro más o menos alternativo, que programa –y produce– obras más o menos alternativas (bueno, una vez fui a ver una obra de Albert Espinosa, que no sé si es muy alternativo, pero la obra estaba bien, y se veía y se oía bien sin que los actores se tuvieran que dejar la voz), pero con suficientes medios como para dar unos resultados dignos; que se puede ser pobre pero trabajar bien y esforzarse, y potenciar unos detalles y esconder otros para que la obra y la representación sean lo mejor posibles. Y éste es el caso.
Por eso hace ya quince años que ocupa esta sala junto a la Ronda Sant Pau –un posible off-Paral*lel-, y los que le quedan.
¡Tan Tantarantana!